Detenido en Villaverde por maltratar a su mujer y sus hijos empleando la sumisión química para anular su voluntad
El marido llevaba varios semanas echando en la comida y el té una sustancia de color rosa que dejaba a la mujer mareada e indispuesta, según denunció la esposa
LUIS F. DURÁN
Madrid
La Policía Municipal detuvo el pasado martes en el distrito de Villaverde Alto (Madrid) a un hombre marroquí de 47 años, acusado de maltratar y pegar a su pareja, de 41 años y también marroquí, y a sus dos hijos bajo la influencia de sustancias psicotrópicas. Se sospecha que es uno de los primeros casos en España de violencia machista con la agravante de sumisión química.
Los agentes descubrieron el caso tras arrestar al padre, que presuntamente echaba en el té y la comida una sustancia de color rosa para someter a los miembros de su familia. La mujer y los dos hijos fueron trasladados al Hospital 12 de Octubre, donde quedaron ingresados, activándose el protocolo por sumisión química que se suele poner en marcha en casos de agresión sexual.
La intervención de los agentes de la Unidad Integral de la Policía Municipal de Villaverde se inició tras recibir la emisora del 092 un aviso de un vecino del inmueble por una pelea entre un padre y su hijo menor de edad. Los policías se personaron en la calle de Godella y subieron al inmueble donde se producía el incidente. Llamaron al timbre y el padre de familia les abrió la puerta.
Uno de los agentes interrogó por separado al hombre, que les manifestó que lo que había tenido era una fuerte discusión con su mujer, no con su hijo, alegando que eran «cosas de familia». Al mismo tiempo, el otro agente habló con la esposa en otra estancia de la casa. Ella contó que fue empujada por su marido contra la pared y golpeada en la cabeza. Agregó que los malos tratos eran frecuentes y que, además, había observado que en el té y las comidas había encontrado una sustancia de color rosa de sabor muy amargo y que muchas veces se hallaba indispuesta y mareada tras tomar esos alimentos. Al ver el cariz del asunto se personaron en la casa más dotaciones policiales.
En la vivienda estaba otro de los hijos de 13 años, que también relató a la Policía Municipal que su padre insultaba de forma habitual a su madre diciéndola: «Inútil, yo te traje de Marruecos, si no no tendrías dinero, tienes que hacer lo que yo te diga....». Añadió el menor que también habían notado en las comidas una sustancia que les ocasionaba un gran malestar a él y a su hermano pequeño. En ese momento, la madre entró en la habitación donde estaba el niño con el agente, portando unas bolsas que contenían la extraña sustancia a la que ambos habían hecho referencia anteriormente. Tanto la mujer como el hijo desconocían de qué materia se trataba, pero dijeron a los agentes que eran los elementos que el cabeza de familia esparcía en la comida y la bebida desde hacía pocas semanas.
Además, la mujer relató a los agentes que había encontrado las sustancias en otra habitación de la casa que su marido tenía siempre cerrada y donde todos los miembros de la familia tenían prohibida la entrada.
Finalmente, el hombre fue detenido por la Policía Municipal acusado de un presunto de delito de violencia de género y otro delito contra la salud pública por emplear una sustancia, aún sin determinar, para anular la voluntad de su mujer y sus hijos.
Los agentes de la Policía Municipal acudieron al colegio para recoger al otro hijo menor de la pareja, de 10 años, que se encontraba en clase.
Posteriormente, la Policía Municipal trasladó al Hospital 12 de Octubre a la madre y a sus dos hijos, donde se inició el protocolo de sumisión química tanto a la progenitora como a los menores. Una vez en el centro sanitario, los policías municipales que actuaron fueron relevados por otra dotación que se encargó de seguir con la vigilancia y custodia de la familia.
Los dos menores fueron trasladados a la urgencia de pediatría, y la madre, tras entrar en urgencias generales, quedó ingresada. La Policía Municipal realizó un atestado del caso y entregó las diligencias en la comisaría de Policía Nacional del distrito de Usera Villaverde.
https://www.elmundo.es/madrid/2022/04/07/624d84d2e4d4d869138b4599.html
Gracias a Dios porque podría haberlos matado envenenando la comida.