#48
Me ha gustado tu respuesta.
Viene de una ilusión de control. Todo el mundo dice feos y demás, pero he visto a gente guapa y con buen cuerpo pagafantear. Si alguien con dudas no lo hace siempre pensará "pero hubiera podido hacer...". Y ahí está el peligro de correlación y causalidad. ¿Te la hubieras ligado igual sin pagafantear? ¿Te ha rechazado por pagafantear y tú irás diciendo después que encima pagando de más las mujeres no valen la pena? Pura casuística humana. Aparte, como han dicho, es como un escudo para no autoanalizarte. ¿He sido yo quien la ha cagado? ¿He focalizado en el target incorrecto? ¿He querido entrar a alguien sin ganas porque realmente aún me siento inseguro por "x" o "y" o simplemente añoro a mi ex y me estoy forzando?
En mi caso nunca he pagafanteado, y no lo veo un motivo de orgullo ni nada. Me gustaría pagar cosas (querría decir que no soy pobre y tengo que contar mis céntimos como ahora) a la persona que quisiera. Y que ella se enfadara y me intentara invitar otro día en otro sitio... no es malo en sí si no a quién se dirige esa acción. He invitado a comer a mujeres con novio que espero que no me lo devuelvan. Porque las quiero (a ellas), no quiero (su dinero ni follar con ellas) y querría (repetir). Es una lástima que éstas siempre estén ocupadas y hasta fuera de España. Y cuando vienen con estrés, curro, familia y viajes y todo pendiente; dicen "vente a tomar algo que te invito". Si no fuese tan insensible se me saltarían las lágrimas.