Ante esta baja participación y viendome venir los resultados, no puedo más que acordarme del discurso de abdicación de Amadeo I de Saboya del trono de España, hace casi 150 años:
spoiler"se me ofrecía rodeada de las dificultades y peligros que lleva consigo la empresa de gobernar un país tan hondamente perturbado. "[...]"Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha, entonces al frente de estos soldados tan valientes como sufridos, sería el primero en combatirlos; pero todos los que con la espada, con la pluma, con la palabra, agravan y perpetúan los males de la nación, son españoles, todos invocan el dulce nombre de la Patria, todos pelean y se agitan por su bien; y entre el fragor del combate, entre el confuso, atronador y contradictorio clamor de los partidos, entre tantas y tan opuestas manifestaciones de la opinión pública, es imposible atinar cual es la verdadera y más imposible todavía hallar el remedio para tantos males."[...]"tengo hoy la firmísimo convicción de que serían estériles mis esfuerzos e irrealizables mis propósitos."Estas son, Señores Diputados, las razones que me mueven a devolver a la Nación, y en su nombre a vosotros, la Corona que me ofreció el voto nacional haciendo de ella renuncia por mí, por mis hijos y sucesores."
Nada ha cambiado en este país. Creo que tiene que ser algo en el aire o en la tierra, porque otra explicación para la enfermedad política que lleva este país en sus genes no la encuentro.