Los batiscafos rusos 'Mir-1' y 'Mir-2' han encontrado petróleo en el fondo del lago Baikal, cuyas reservas energéticas nunca han podido ser estimadas, informaron fuentes de la expedición.
"Anoche la inmersión fue todo un éxito. Los batiscafos localizaron exactamente el punto donde el petróleo asciende a la superficie", señaló Mijaíl Grachov, experto de la Academia de Ciencias de Rusia.
Grachov añadió que los sumergibles aún no han podido tomar imágenes del foco petrolífero, pero lo harán en próximas inmersiones. "En esa zona el agua es como si fuera una tetera en plena ebullición", explicó.
Los científicos que viajan en las Mir, quienes hace unas semanas lograron llegar por primera vez al fondo del lago siberiano, tomaron numerosas muestras de microorganismos, que viven en las profundidades del Baikal, y que no viven del sol sino del petróleo.
"Nadie conoce el mecanismo de formación del petróleo. La investigación en el Baikal podría hacer progresar la ciencia, para que podamos buscar petróleo de manera más racional", apuntó Grachov.
El experto estima en cuatro las toneladas de petróleo que ascienden anualmente desde las profundidades a la superficie del Baikal, que acoge las quintas reservas de agua dulce del mundo.
Por otra parte, la expedición busca determinar con exactitud la profundidad del lago, detectar posibles fuentes subterráneas de procesos termales y tomar datos tectónicos, ya que el lago experimenta unos dos mil seísmos anuales de baja intensidad.
Según los científicos, el lago podría contener gases como el metano, que por efecto del calentamiento global podrían ser liberados a la atmósfera, lo que elevaría peligrosamente la temperatura de nuestro planeta.
El lago siberiano Baikal con 31.494 kilómetros cuadrados de superficie, 636 kilómetros de largo, 80 kilómetros de ancho y 1.637 metros de profundidad, es el más profundo del mundo. Con 23.400 kilómetros cúbicos de agua, el Baikal supera con creces el volumen conjunto de agua de los cinco Grandes Lagos de Estados Unidos y Canadá.
http://elmundo.es/elmundo/2008/08/07/ciencia/1218108818.html
Lo curioso de esta noticia no es el hallazo de encontrar petroleo sino el hallazo de microorganismos, que viven en las profundidades del Baikal, y que no viven del sol sino del petróleo.
Impresionante!