Kagney Linn Karter, estrella del cine porno de 36 años de edad, ha sido encontrada muerta en su causa. La intérprete, que comenzó en la industria del cine para adultos a comienzos de los 2000, se habría quitado la vida. Supone así un nuevo y trágico capítulo dentro de la industria del porno, con varias pornstars muertas durante estos meses por diferentes problemas relacionados con la salud mental. Linn Karter falleció el pasado jueves en el condado de Cuyahoga en Ohio, Estados Unidos, y ha puesto el foco de nuevo en una industria que mira hacia otro lado en estas situaciones.
Como ha confirmado un representante del Departamento de Policía de Parma, parece que la actriz se quitó la vida, ya que lidiaba durante meses con una profunda depresión de la que no ha sido capaz de salir. Sus amigos y familiares han confirmado la trágica noticia, iniciado un GoFundMe en nombre de su madre, Tina, para sufragar los gastos derivados del entierro y realizarle un homenaje. Los organizadores del Fondo de Ayuda GoFundMe han explicado que todo el dinero recaudado por los mecenas se usará para los servicios funerarios y algunos actos conmemorativos. En esta momentos, con una meta de 8000 dólares, ha recaudado más de 6000, y planea usar el dinero sobrante para donaciones a una organización local de rescate de animales, una de las pasiones de la actriz.
Durante décadas, los actores y actrices porno, han lidiado con problemas mentales relacionados con su profesión. La industria del cine para adultos, preocupada por el auge de OnlyFans y la irrupción de nuevas herramientas tecnológicas, exige cada vez más a sus estrellas en las producciones mientras reduce la inversión y los salarios de muchas de sus estrellas. Esto, unido al nuevo sistema de verificación de edad que preparan en España y otros países para evitar el consumo de porno en edades tempranas, han puesto a la industria en el punto de mira de políticos y críticos.