Si alguna vez nos extinguiéramos, y una civilización nos sucediera, ¡podrían clonarnos sacando el ADN de los chicles que hay pegados por las calles! Habría bacterías en ellos, y conocerían las patologías que sufrimos, etc...
En una de esas cajas del tiempo yo metería un chicle escupido mío, para que me clonasen al desenterrarla y volver a la vida