Voy a intentar reactivar un poco esto.
Hace casi dos meses que empecé a tomarme un poco más en serio mi privacidadEmpecé con lo básico:
- Volví a instalar Linux (Mint) en mi SSD para utilizarlo como mi SO principal
- Me pasé a LineageOS (microG) en mi teléfono
- Desactivé todo el telemetry de Windows con la ayuda de las herramientas de turno
El siguiente gran muro fue el navegador. Súper fácil:
- Recuperar Firefox como mi navegador principal
- uBlock Origin, NoScript, Decentraleyes, Privacy Badger, CookieAutodelete, HTTPS Everywhere
- Startpage como buscador principal y DuckDuckGo como segunda opinión
- Utilizar contenedores para aislar Facebook asi como Google y sus servicios (de forma temporal hasta deshacerme de ellos definitivamente)
- Instalar Tor y utilizarlo para búsquedas y navegación casual
Y finalmente:
- Reemplazar servicios, aplicaciones y programas, y añadir otros. La lista es algo larga, asi que me la ahorro
- Escrutinio completo de la cuenta de Google (en proceso de borrado)
- Revisión completa de todos los servicios que tienen mis datos y eliminarlos o reemplazar esos datos
Hay tres servicios de Google que son totalmente irremplazables:
- Google Maps. La opción más conveniente que encontré es la siguiente: utilizarlo sin cuenta, bloquear todos los permisos que no sean absolutamente imprescindibles, incluída la ubicación, y combinarlo con Maps.me (las demás opciones me parecen una grandísima broma). Utilizo esta última para ubicarme de forma precisa en el mundo, y Maps para todo el resto (encontrar negocios, ir de punto A a punto B, fotos de sitios, etc.)
- Google Traductor. Al viajar, este traductor es literalmente la única opción para entenderse con la gente de forma rápida y sencilla. Para traducciones puntuales hay muchísimas opciones, eso está claro.
- Youtube. Esta habla por si sola.
Durante el proceso, hay unas palabras que retumbaron duramente en mi cabeza:
La privacidad y el anonimato están muy bien hasta que chocan completamente con la productividad.
En serio, llevo dos meses con esa frase en la cabeza. Literal.
Y es que hacer periódicamente copias de seguridad de contactos, calendario, fotos, notas, archivos... es duro. No es un hábito que pueda tomar cualquiera teniendo en cuenta la increíble facilidad que tiene el resto para hacerlo. Sobre todo si utilizamos todos esos datos para el trabajo (que no es mi caso, afortunadamente)
Al final del día me pregunto: ¿para qué? No sé si esto tiene la probabilidad suficiente como para tener impacto en mi vida. Por un lado sienta bien no estar bajo el manto de Google y poder mantener mis datos y mi vida relativamente a salvo y controlados. Pero por otro siento que estoy perdiendo oportunidades y gastando demasiados recursos y energía en todo esto.
De hecho, aunque quisiéramos esquivarlo todo, no podríamos:
Periodista de Gizmodo que se pasa 6 semanas bloqueando totalmente una a una las grandes compañías de tecnología, a saber, Amazon, Facebook, Google, Microsoft y Apple. Una serie de vídeos cortos muy interesante
Igual es que simplemente es por el proceso inicial, pero se hace cuesta arriba tener constantemente que buscar alternativas a grandes productos y servicios, revisar sus políticas de privacidad, testearlos, desinstalarlos, buscar de nuevo, revisar permisos, concederlos, denegarlos, tener que dar explicaciones a la gente que te rodea...