Hola, hoy quiero hablar de la Ruanda tradicional, que me parece una nación muy bella.
En la Ruanda tradicional había tres castas diferenciadas: los tutsis, que detentaban el poder político y económico y eran la casta pastoral y militar; los hutus, que eran agricultores y estaban dominados por los tutsis; y los twa, que desempeñaban profesiones marginales. Los tutsis eran altos, los hutus eran de estatura media y los twa eran bajos. Los matrimonios entre los twa y las otras dos castas estaban prohibidos. Los matrimonios entre tutsis y hutus eran raros, pero ocurrían esporádicamente. La adscripción a la casta hutu o tutsi la otorgaba el padre: si el padre era tutsi y la madre era hutu, por ejemplo, el hijo era tutsi. Quizá por este motivo los matrimonios entre mujeres tutsi y hombres hutu eran mucho más frecuentes que los matrimonios entre hombres tutsi y mujeres hutu (los tutsis no querían contaminar su sangre con sangre hutu). Las leyes eran distintas para hutus y para tutsis: si un tutsi mataba a un hutu, por ejemplo, el clan del hutu asesinado podía reclamar la vida del asesino; pero si un hutu mataba a un tutsi, el clan del tutsi asesinado podía reclamar la vida del asesino y de un familiar suyo.
El rey, denominado mwami, se consideraba una figura semidivina. Pertenecía al clan Nyiginya. Además del rey existía también la figura de la reina madre, de considerable poder. El rey tenía a su disposición a un grupo de consejeros y a otro de guardianes de la tradición, así como a un ministro de la guerra, otro de los pastos y otro de las tierras. Por debajo de estos funcionarios estaban los jefes de distrito, los jefes de colinas y los jefes de vecindario. Un 95% de estos jefes eran tutsis. La ley del reino, que se consideraba emanada de Dios (Imana) se llamaba Abviru.
Toda la población ruandesa se hallaba en tres tipos de relación: ubukonde, ubuhake y uburetwa. En la relación de ubukonde, un hutu prestaba sus servicios a otro hutu propietario de tierras a cambio de una parte del usufructo de dichas tierras. En la relación de ubuhake, un tutsi o un hutu prestaba sus servicios a un tutsi a cambio del uso de algunas cabezas de ganado y de su cesión al cabo de un tiempo. En la relación de un uburetwa, en la que estaba incluido todo hutu que no estuviera bajo una relación de ubuhake con un tutsi, el hutu en cuestión estaba obligado a realizar trabajos no remunerados para su jefe tutsi. Todo tutsi se hallaba en una relación de ubuhake con otro tutsi, en una jerarquía que descendía desde el rey hasta el tutsi más pobre; en cambio, solo algunos hutus se hallaban en una relación de ubuhake con un tutsi, el resto se hallaban en una relación de uburetwa y debían desempeñar trabajos forzados no remunerados para sus jefes tutsi, como ya he explicado. Así mismo los hutus debían pagar un impuesto sobre la tierra.
Las familias ruandesas eran muy bellas, heredaba la propiedad el hijo varón mayor, o la hija mayor en caso de faltar hijos varones, y vivían juntas tres generaciones. Las mujeres eran quienes tenían autoridad sobre la familia. La gran mayoría de los matrimonios eran monógamos.
El mayor símbolo de riqueza en Ruanda eran las vacas. La mayoría de sus poseedores eran tutsis, de quienes se decía que se alimentaban únicamente de productos lácteos (lo cual obviamente no era cierto). Los tutsis solían ir a academias en las que aprendían habilidades como la conversación (kuganira), la perserverancia (kwihangana), la gentileza y cortesía (ikinyabupfura), el dominio de uno mismo (kwitonda), la danza, el canto, la poesía (ibyivugo), la generosidad hacia los necesitados, etc. En estas academias también recibían instrucción militar y deportiva: se les enseñaba a lanzar jabalinas, saltar, correr, cabalgar, luchar, etc. Lo cual ya no es tan laudable.
Bueno, si tenéis alguna pregunta sobre la Ruanda tradicional podéis hacérmela.