Campañas publicitarias como las de Dove y su "belleza real" o el reciente número de la revista Glamour en el que observamos a una Lizzi Miller, en mi opinión, bastante desfavorecida, han reabierto el debate acerca de los actuales cánones de belleza y de lo que entendemos por estética.
Con este hilo no pretendo crear una nueva discusión acerca de la belleza y su subjetividad, sencillamente pretendo disipar una serie de dudas acerca de lo que recientemente he tenido la oportunidad de observar en un amplio número de jóvenes, las cuales, de palabra, están claramente posicionadas a favor de estos nuevos estereotipos de mujeres; y digo de palabra porque a la hora de la verdad de todos es sabido que el camino a seguir para millones de adolescentes dista en gran medida de una modelo de 1.80 m y 80 kg de peso.
¿Acaso no estamos ante claros ejemplos de marketing viral que no pretenden más que promocionar sus productos creando de paso polémica debido al carácter chocante y transgresor que tan de moda se ha puesto últimamente? A mi entender, el hecho de que una persona se sienta bien consigo misma siendo poseedora de un físico claramente poco agraciado es digno de admiración, pero me parece insultante que pretenda alardear de ello y mucho menos nublar a otros la visión con su sentido de la estética.
No sé, de toda la puta vida me han enseñado que nada se consigue sin sacrificio y que la belleza aumenta según el grado de dificultad. Parece ser que ahora todos somos guapos y estamos buenos por el simple hecho de sentirnos así. Me recuerda al clásico ejemplo de un par de trazos sobre un lienzo al que denominamos... arte.
Hipocresía...
Fuente: http://www.abc.es/20090827/gente-rocks-tops-tops/modelo-glamour-200908271022.html