La familia y amigos de Jorge León, el pentapléjico hallado sin vida en Valladolid, han lanzado un mensaje en su recuerdo pidiendo, como lo hizo él, el derecho de todos a una "muerte con dignidad, sin dolor añadido, sin que se persiga a esa mano que acercó un vaso a una boca sedienta de libertad, de dignidad y de paz". Este desenlace, dicen sus allegados en un comunicado, era una "muerte anunciada" porque nunca ocultó su deseo de liberarse de la trágica situación.
En estas líneas, enmarcadas bajo el título 'In memoriam', quienes conocían a Jorge León piden respeto hacia su persona porque Jorge "amaba la vida", "no quería convertirse en otro Ramón Sampedro" y tampoco se creía "'superman' postrado en silla de ruedas".
"Por eso, nosotros, quienes le amábamos de una u otra forma, nos negamos a las especulaciones, el trapicheo, la miseria de los aprovechados, los arribistas, los buitres que acuden sólo cuando hay un cadáver fresco", advierten en este comunicado.
"Él amaba la vida de una forma apasionada, tanto, que incluso después del accidente que le dejó postrado e inmóvil, siguió creando, disfrutando de mil cosas, acumulando amigos, experiencias y emociones", recuerdan sus allegados cuatro días después de conocer su muerte.
'Ha logrado escapar de su propio infierno'
El desenlace, aseguran los familiares y amigos de este segoviano de 53 años, "estaba anunciado, a nadie ocultó su deseo de liberarse de la atadura cruel a que le condenó un accidente" y "desde su blog en Internet expuso sus ideas, sus convicciones más profundas, las reflexiones sobre la vida y la muerte que a todos deberían hacernos meditar".
"Y es ahora, cuando ya no está, cuando ha logrado escapar de su propio infierno, cuando todos se vuelven a mirarlo, cuando todos se asombran de lo ocurrido, cuando los medios de comunicación se llenan de especulaciones, análisis y debate..."
"Jorge no quería convertirse en otro Ramón Sampedro, no era 'superman' postrado en silla de ruedas, no era la chica de 'Million Dollar Baby' que se queda pentapléjica en un ring de boxeo. Jorge era él, profesional de la sanidad, artista, escritor, escalador, espeleólogo, creativo, inteligente y vital".
"Por eso, nosotros, en su nombre", dicen los autores del comunicado, "pedimos a las personas de bien que respeten su memoria, que no le juzguen, que no le condenen, que no manipulen su muerte ni su vida". "El derecho a una muerte digna, humana, sin dolor, sin sufrimientos añadidos al propio hecho de morir, fue la bandera que llevó en vida desde su silla de ruedas".
"Nosotros, en su nombre, seguimos pidiendo lo mismo: la regulación legal de la eutanasia para que nadie añada sufrimiento innecesario al ya insoportable sufrimiento de quienes no tienen futuro ni calidad de vida", añaden sus familiares y amigos.
"Si alguien quiere saber algo de esa persona llamada Jorge León, que contemple sus esculturas y sus pinturas, que lea sus textos en su página de Internet. Es su legado, es lo que queda de la gente cuando morimos, porque todos hemos de morir. Pero queremos hacerlo con dignidad, sin sufrimiento, sin dolor añadido, sin que se persiga a esa mano que acercó un vaso a una boca sedienta de libertad, de dignidad y de paz".
Deseo cumplido
Jorge León, fue hallado sin vida por unas de sus cuidadoras en su domicilio de Valladolid el pasado jueves, desconectado del respirador artificial que le mantenía con vida desde que hace seis años un accidente doméstico le dejó postrado en una silla de ruedas.
Desde agosto de 2005 y hasta dos días antes de su muerte, Jorge León, mejor dicho, Lucas S. (seudónimo bajo el que escribía sus textos), intentó a traves de la Red mostrar cómo era su vida diaria, primero en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo y después en su casa de Valladolid, sus miedos, sus deseos. Pero sobre todo intentó demostrar su derecho a una muerte digna.
Ocho meses después, el 21 de marzo de 2006, Jorge dejó atrás su seudónimo y bajo el título 'Me escribe Jorge León' hizo público por primera vez no sólo su dirección y número de teléfono, sino también su necesidad de encontrar "la mano que sostiene el vaso, la mano hábil que supla mi mano inútil, una mano que actúe según mi voluntad aún libre". Parece que alguien le leyó o le escuchó, porque la Policía sospecha, en efecto, que recibió asistencia para llevar a cabo su 'último viaje', al encontrar su cuerpo inerte junto a un vaso de agua.
El Instituto de Medicina Legal de Valladolid espera ahora los resultados del análisis de las muestras que remitió al Instituto Nacional de Toxicología, en Madrid, para elaborar un informe sobre las causas de la muerte de León.
(http://www.elmundo.es/elmundo/2006/05/08/sociedad/1147078387.html)
'Necesito la mano hábil que supla mi mano inútil'
"Quiero decirlo ya claramente y recabar, con todas las precauciones necesarias, ayuda [...] Necesito la mano que sostiene el vaso, la mano hábil que supla mi mano inútil". Éstas son algunas de las últimas líneas que Jorge León, el pentapléjico hallado muerto, escribió en un blog en el que pidió una muerte digna.
"Que tenga cuidado quien entre a estas notas con espíritu inocente y aún cargado con el lastre de los buenos sentimientos. No encontraréis ánimos para seguir adelante ni consuelos cálidos en este rincón...". Con esta advertencia comenzaba Jorge León lo que él quiso llamar "reflexiones descarnadas"
Desde agosto de 2005 y hasta dos días antes de su muerte, Jorge León, mejor dicho, Lucas S. (seudónimo bajo el que escribía sus textos), intentó a traves de la Red mostrar cómo era su vida diaria, primero en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo y después en su casa de Valladolid, sus miedos, sus deseos, pero sobre todo intentó demostrar su derecho a una muerte digna sin "la presencia de una especie de funcionario sanitario mirando el reloj por si me demoro".
"Quiero morir dignamente; quiero vivir mi muerte bien consciente de lo que voy a hacer, esperando preparado y sin presiones el impredecible instante en que me diga 'ya' y beba del vaso liberador que tengo todo el rato a mi alcance", escribía el 14 de agosto de 2005.
Más adelante, explicaba, "cuando sucumbo al miedo a la muerte, se diluye Lucas S. y queda el hombre elemental acojonado, una pobre bestia implorante. Se pierde la entidad y queda la bioquímica en estado de emergencia con las alarmas disparadas pidiendo auxilio".
Ocho meses después, el 21 de marzo de 2006, Jorge dejó atrás su seudónimo y bajo el título 'Me escribe Jorge León' hizo público por primera vez no sólo su dirección y número de teléfono, sino también su necesidad de conseguir "la mano que sostiene el vaso, la mano hábil que supla mi mano inútil, una mano que actúe según mi voluntad aún libre: tengo todo preparado para que quien me ayude quede incógnito".
Deseo cumplido
Parece que alguien le leyó o le escuchó, porque la Policía sospecha, en efecto, que recibió asistencia para llevar a cabo su 'último viaje', al encontrarle junto a un vaso de agua.
Incluso su propio hermano, Carlos León, ha querido ha querido "dar las gracias a quienes hayan ayudado" a que Jorge cumpliera su deseo.
Meses antes, Jorge explicaba las dificultades de un pentapléjico atado a la respiración asistida, a la "parálisis del difragma pulmonar", a los "espasmos", "sudores", "aumento de secreciones", pero sobre todo a los recuerdos.
Jorge se negaba a olvidar lo que un día fue "para no engañarme con lo que soy ahora y para evitar llegar a ser lo que nunca deseé". Nostálgico y frustrado, bajo el nombre de Lucas S., explicaba el 'querer y no poder'.
"Llevaría muy mal tener que renunciar a viajar a esos cuantos lugares pendientes que nadie conoce, a los que parecen ofrecer algo nuevo importante o no poder volver a los que siempre te ofrecen algo por redescubrir", decía.
"Peor aún, es tremendamente dañino comprobar que el cuerpo es un despojo incapaz para el placer pero sí para el dolor".
El 2 de mayo, dos días antes de su muerte escribió su último texto. Al parecer un intento de eutanasia había salido mal hace poco. "No debería estar aquí; una nueva digamos 'contingencia humana' ha vuelto a frustrar el poner fin a esto, justo cuando el resto de circunstancias eran idoneas y mi predisposición fuerte".
Su última frase en su blog fue: "Cuando la muerte es nosotros ya dejamos de ser, y no siendo ni siquiera la muerte existe (¿o acaso tiene el espacio conciencia de muerte o de cualquier otra cosa?)".
(http://www.elmundo.es/elmundo/2006/05/08/sociedad/1147054617.html)
Esta me parece una de las noticias más importantes en los últimos tiempos... una noticia sobre el derecho como seres humanos a elegir nuestro propio destino... a hacer con nuestras vidas lo que nosotros queramos hacer.
Quizá me arrepienta de escribir la dirección de su blog... espero que a nadie se lo ocurra hacer ninguna bobada... a quien le apetezca echar un vistazo e incluso dejar una firma (como yo mismo he hecho) que lo haga, pero por favor... tened un poco de respeto por las cosas serias y la gente que ya no está entre nosotros: http://destiladospentaplejicos.blogspot.com/
Salu2... desde el otro lado