#1 Soy nutricionista y tecnólogo de los alimentos, y se me ocurren varios motivos por los que puede decir eso tu amigo:
-es "nutricionista" por un cursillo de tres meses.
-no tiene ni puta idea de lo que habla, ni de los fundamentos más básicos de fisiología o de como funcionan los principios básicos del metabolismo.
La leche que tomamos es un alimento sometido a un largo procesado industrial, pero en absoluto es cierto todo lo que dice tu amigo. Es la principal fuente de calcio de la que disponemos los seres humanos, completamente necesaria para el tratamiento y prevención de muchísimas enfermedades, a no ser que comas besugo cuatro o cinco veces por semana. Y, finalmente, no hay ni un solo estudio de prestigio que sostenga semejante disparate, igual que no hay ninguno que sostenga que el aspartamo da cáncer o que la vitamina C refuerza nuestras defensas frente a los resfriados. Y no, la leche de soja no es leche y apenas tiene calcio de manera natural, hay que añadírselo (probablemente de origen de la leche de vaca) para que lo tenga.
PD: "Varios tipos de calcio", lol.
Y a lo que dice #94, es otra falacia más fruto, probablemente, de la ignorancia. Los humanos no es que tengamos una "beta" para digerir la leche, es que tenemos una enzima destinada específicamente para ello, la lactasa, que rompe el enlace alfa 1-4 que une los monosacáridos que forman la lactosa para que seamos capaces de absorberlos. No sé de donde te has sacado semejante afirmación.
#110 por supuesto que lo está. De otra manera, prácticamente la totalidad de la población tendría deficiencias de calcio con todo lo que eso conlleva. A nuestro organismo no le importa de donde venga el calcio, es calcio. La leche no dispone de ningún antinutriente que evite que lo absorbamos, como por ejemplo pasa con las lentejas y su famoso hierro.