Hoy toca otra vez jugar la carta del victimismo y la pena, del pueblo oprimido e incomprendido por la malvada España...
Sois unos sinvergüenzas, los CATALANES NO SEPARATISTAS no vamos a olvidar estos últimos 10 años de presión, vejaciones, humillación, maltrato, desprecios, etc.
Tengo sobrinas pequeñas que venían a casa preguntando a ver si ellas eran (y cito literal) “castellanas” o catalanas.
Tengo, lo que yo pensaba que eran amigos, que me han insultado y faltado al respeto gravemente por redes sociales y whatsapp... y algunos con los que ya no pude volver a ir a tomar una caña.
Hemos aguantado caceroladas días y días en Barcelona molestando a los vecinos y agitándonos la mente de una manera atroz...
Recordamos cada una de las palabras de vuestros líderes con pies de barro, que nos decían que no éramos catalanes por no ser separatistas, convirtiéndonos en parias en nuestra tierra.
Hemos agachado la cabeza ante vuestra falsa supremacía moral demasiadas veces, teniendo que ponernos un disfraz conciliador ante vuestros fascistas argumentos de España nos roba, los españoles son unos vagos, estaríamos mucho mejor y seríamos más ricos sin la lacra española, ellos son súbditos y nosotros queremos ser libres...
Hemos aguantado que las escuelas se convirtieran en centros de adoctrinamiento con 2 clases de lengua española a la semana, con casi la mitad de un profesorado lleno de fanáticos afiliados a partidos separatistas...
Hemos pagado una televisión y medios públicos que nos insultaban a los que nos sentíamos españoles, con una programación puesta a disposición del régimen para seguir retroalimentando vuestra ideología supremacista y vuestro sectarismo, había programas decentes como Polonia o Crackovia que también os acabasteis cargando con vuestro fanatismo, hasta los programas infantiles que ven mis sobrinas del Super3.
Hemos pagado vuestras multas lingüísticas por rotular nuestros negocios en español, algunos heredados de nuestros padres con carteles con más de 20 años que tuvimos que cambiar.
Hemos perdido clientes de nuestros negocios de otras partes de España por sentirse insultados (y con razón) por vuestras palabras, actitudes altaneras y xenofobia.
Hemos visto lo bien que vivían muchos de esta mierda de procés, como de la nada fueron saliendo arribistas y estómagos agradecidos a docenas pagados con nuestros impuestos: Rufián, Jordi Sànchez, Cuixart, Espot, Eduardo Reyes, Rahola y miles de etcs.
Habéis malgastado los recursos de la región más rica de España en embajadas ridículas en el extranjero, salarios estratosféricos a politicuchos de medio pelo, ANC, Omnium, Súmate, etc. mientras cerraban plantas de hospitales y los escolares tenían que ir a barracones, farmacias quedaban sin pagar, etc.
Habéis prostituido un cuerpo de policía que era respetado, como los Mossos de esquadra, convirtiéndoles en una parodia de policía política al servicio del fanatismo rupturista...
Habéis convertido las universidades públicas en casales okupas de la CUP y arran...
Habéis golpeado a jóvenes de SCC en las universidades solo por poner carpas fomentando un punto de vista político diferente al vuestro, pateado a chicas por poner carpas de apoyo a la selección española de fútbol.
Habéis silbado nuestro himno, quemado nuestra bandera, abucheado al jefe del Estado, etc.
Habéis montado un complot para perjudicar la imagen de España internacionalmente, saliendo todos los ciudadanos dañados también, con el paripé del 1-Oct. solo para buscar que un país extranjero señalase al España para echarnos en sus brazos sin escrúpulos, aunque los catalanes quedásemos endeudados durante siglos por ello (como les pasó a los países de Hispanoamérica) y dejándonos la mácula de traidores a nuestros hermanos.
Habéis echado del Camp Nou a muchos culés con vuestra radicalidad, de la Iglesia a muchos creyentes, etc.
Llegó el momento de aplastaros y que no levantéis cabeza en mucho tiempo, habéis colmado el vaso, pero no un simple vaso de vidrio... llenasteis una gran garganta de agua que ha desbordado los diques y va a arrasar todo el valle de odio y falacias que habéis construido.