—He estado pensando en lo que hablamos el otro día...
—¿Cómo? ¿A qué te refieres?
— Sí...bueno...ya sabes, lo que me dijiste que también te gustan las tías y tal.
— Ah...jaja..oye no te ralles ni nada, lo dije un poco por decir. No te vayas a pensar que voy por ahí to salida detrás de todas las tías que veo o de mis amigas. Jaja. Ya te dije que es más bien curiosidad que otra cosa.
— Ya...es solo que... he estado pensando...
— ¡A ver con qué me sales!
— Jaja...nooooo...mira, lo que quiero decir es que para vosotras es muy fácil. Ser bisexual en tías es como algo que está bien visto. Es totalmente aceptable. Ahora, imaginate que yo te dijese lo mismo: soy bisexual.
— Sí, claro, ¡tú bisexual! Pero si estás todo el rato mirandole las tetas a cualquiera que pasa por tu lado.
— Por eso te digo. No es lo mismo. No lo soy. Pero si lo fuese sería mucho más raro que si tú lo eres.
— Ya...no sé. ¿Eres bisexual?
— Mira...te voy a ser sincero...quería intentar sacar un argumento convincente para que acabáramos haciendo un trio pero me he perdido bastante. En mi imaginación era mucho más sencillo. :S
— Jajajajajajajaja. Qué tonto. Mira que eres tonto.
— Oyeee...a ver...uno tiene que aprovechar las oportunidades. Es el sueño de cualquier hombre.
— ¿Ah sí?, ¿Tanto te pone?
— Mira, solo imaginarnos follándonos los dos a una desconocida y hacerla gozar. Imaginarte besándola. Besándome las dos...uff...sí. Me pone mucho.
— jajaja. ¿Y no te daría envídia?
— ¿Y a ti?
— No sé...sería un poco raro.
— Más que raro sería algo diferente. Nuevo. Tranquila, no te estoy pidiendo nada. Pero me gusta imaginarme cosas así. De todas formas no puedo evitarlo, así que lo comparto contigo.
— jajaja. Eres un salido.
— Eso es por ti. Que me pones mucho.
(...)