La Cámara afronta nuevas obras de reforma que incluyen la redecoración del despacho del presidente, el bar exclusivo de diputados, tapices, vidrieras y nueva carpintería exterior.
Un suma y sigue de trabajos de reparación y modernización de los que algunos miembros de la Mesa decían ayer no tener constancia alguna. Este periódico preguntó en Presidencia, que remitió a la responsable de la Mesa de Contratación para cualquier explicación, y ésta al encontrarse fuera de Madrid dijo no tener acceso a los datos, pero que se trataba de obras «necesarias» y «autorizadas todas» por el procedimiento habitual.
Resumiendo, que no quieren decir lo que se van a gastar.
¿Crisis? ¿Para quien? Ah si, para los de siempre.