"Yo no quería 5.000 euros, sino un techo bajo el que vivir", dice una de las okupas de la Corrala de la Bahía
Pasadas las nueve de esta mañana salían, sin incidentes, pero con indignación y sentimiento de derrota, las últimas personas que desde hace años -algunas hasta ocho- ocupaban las viviendas del edificio denominado La Corrala de la Bahía. "Yo no quería 5.000 euros, sino vivir bajo un techo", decía Carmen, una las mujeres desalojadas, que aseguraba haberse pensado hasta el último momento si aceptaba o no el dinero.
A partir de las siete de esta mañana, un abogado representante de Haya Real State, la sociedad que gestiona en España el edificio propiedad del grupo de inversión estadounidense Cerberus Capital Management L.P. fue, casa por casa, entregando un cheque de algo más de 5.000 euros a cada uno de sus habitantes, previa firma de un documento en el que se comprometían a abandonar el edificio y en el que renunciaban a cualquier ejercer cualquier tipo de reclamación.
Después de casi un mes y medio de negociaciones la empresa había fijado el día de hoy como la fecha límite para el desalojo del edificio ocupado. Anoche ya había encomendado a una empresa de seguridad que controlase la entrada y salida del inmueble. Entre las nueve y las once de la noche salían del edificio con cuentagotas personas cargadas con sus enseres y muebles. Algunas, hasta con un inodoro a cuestas. Otras prefirieron hacerlo esta mañana, una vez firmado el acuerdo y cobrado el cheque. Hubo quien se quejó de que no les habían permitido recoger todos sus efectos personales.
Pese a que el desalojo se produjo sin incidentes reseñables, un hombre que llevaba bajo el brazo una carpeta repleta de documentos, estuvo intentando convencer de manera insistente al abogado de que él también había vivido allí y de que también le correspondía la indemnización, si puede llamársele de esta manera.
Con la desocupación de la denominada Corrala de la Bahía se pone fin a un culebrón que retrata el dramático problema de la falta de viviendas públicas y accesibles para las personas con menos recursos en la ciudad y a un primer intento de convertir en un proyecto social un edificio abandonado propiedad de un poderoso grupo de inversión, que luego derivó en un auténtico infierno de delincuencia y violencia por parte de un grupo de personas que se incorporaron posteriormente y que mantuvieron en vilo a todo el vecindario.
Fuente: https://www.diariodecadiz.es/cadiz/Vivienda-Cadiz-5000-euros-okupas-Corrala-Bahia_0_1549945297.html