Voy a por un cola-cao y hago una descripción detallada del tema ;D
Ahora hago un caracoledit y listos.
Veamos. De esto hace ya 4 o 5 años.
Estamos en una clase de filosofía (¿o era ética?) discutiendo sobre el alma o algo parecido y mis colegas y yo empezamos a decir que eso no tiene sentido alguno actualmente y todo lo demás. Salta una amiga nuestra y nos dice que si tan seguros estamos, que quedemos y que ella nos demuestra con una ouija que realmente el alma existe.
Bien, quedamos. Yo estaba convencidísimo de que no se iba a ver una mierda y de que nos estaba tomando el pelo.
Quedamos un sábado más o menos al atardecer. Al llegar el que faltaba (siempre hay uno que llega tarde) nos dirigimos al lugar, a la puerta del parking de unos apartamentos. Estamos casi en noviembre, así que allí no hay ni cristo. La entrada del parking está por debajo de la carretera así que desde la carretera no se nos ve. Nos sentamos sin prisa, riéndonos aún de las burlas que le iban a esperar a nuestra amiga con lo que queda de curso.
Una vez sentados y en círculo, encendemos unas velas a nuestro alrededor (para darle ambiente al asunto) mientras mi amiga saca el tablero (de madera) y la ficha (un triángulo isósceles de plástico... esto último me sorprendió porque esperaba algo redondo).
Mi amiga empieza a recitar dios sabe qué mientras tenemos los dedos encima del cachivache de plástico. Nada. El tiempo pasa muuuuy despacio, parece que llevamos una eternidad pero apenas llevamos 5 minutos. Nada. Han pasado diez minutos y nada se mueve. Empieza el cachondeo general: esto es un tongo, ya lo sabía yo, nos debes una cena.... pero decidimos esperar un poco más (ella nos dice que cuando hay gente que niega todo eso es más difícil "que venga"). Media hora...de repente aquello empieza a moverse. Primero despacio, en círculo, sin sentido ni dirección alguna, para pararse de repente en el medio.
En ese momento, ella le pide que nos diga que quién es, y "eso" nos dice que es un soldado español que murió en las filipinas, en el siglo XIX (o XVIII, en la guerra de la independencia... como no recuerdo en qué siglo es...). Ahora ya empieza a moverse más rápidamente, el movimiento es púramente mecánico, preciso como un reloj.
Le preguntamos si nos quiere decir algo a cada uno y responde que sí: va señalando a cada uno de nosotros por separado y nos va diciendo cosas. Para mí sorpresa (y horror) no sólo el triángulo se dirige a la letra en línea recta y con una precisión acojonante, sino que lo hace girando debajo de nuestros dedos, puesto que siempre señala las letras con el vértice con menor ángulo. Un par de veces hago fuerza en dirección contraria para intentar deternerlo, pero me sorprendo más aún al ver que no lo consigo, que sólo consigo ralentizarlo un poco.
Empezamos a decir que es ella quién lo mueve, así que ella simplemente quita su dedo de la ficha y ésta sigue moviéndose al mismo ritmo que antes, con el mismo moviemiento mecánico y girando debajo de nuestros dedos. Va tan deprisa y para tan rápido que en más de una ocasión a alguien se le escapa el dedo.
Va señalando a mis amigos uno por uno y éstos le preguntan cosas: cuando nació mi padre, cuando murió mi abuelo (preguntas que sólo sabes tú, vaya)... y o bien acierta o bien dice que no lo sabe, pero no se equivoca en ningún momento.
En estas estamos que me señala a mí, y empieza a deletrear...
T... I...E....N....E...S.... y en ese momento, a parte de estar acojonado, empiezo a pensar qué es lo que puedo tener (llaves, dinero, cartera, móvil...) y sigue escribiendo.... M....I....E....D....O.....ahí suelto el dedo soltando un profundo suspiro... aunque consigo sobreponerme y lo pongo otra vez ahí.
Seguimos un rato con las preguntas y tal y nos dice si tenemos un cigarrillo, y le decimos que sí: lo encendemos y lo ponemos en el medio. Parece como si alguien le estuviera dando una calada (se pone bien roja la parte por donde se enciende y sale humo por debajo) (NDE: vale, esto puede pasar por mil motivos, ya lo sé. Estoy transcribiendo lo que pasó y nada más. Hay cosas que pueden ocurrir por infinidad de motivos, pero otras no pueden explicarse de muchas maneras ).
Antes de despedirnos, nos avisa de una cosa: EL PRÓXIMO LUNES, A LAS 8:15 MINUTOS, LA PERSONA X Y LA PERSONA Y VAN A CHOCAR.
Para nuestro asombro, justamente el lunes siguente (de 8 a 8:50 teníamos educación física) en la hora indicada, las personas que "eso" nos indicó chocaron (de una forma bastante absurda, todo sea dicho) cayendo al suelo.
REFLEXIÓN: es cierto que hay cosas que son cosa de la mente, por ejemplo lo del tabaco. Pero no hay forma humana posible de mover una ficha triangular haciendo giros de 180º todo el rato sin hacer giros rarísimos con el codo (y levantando el dedo para seguir girando) e, incluso cuando ella quitó el dedo, se movía exactamente igual. No hay ciencia que explique eso.
PD: de los colegas que fuimos, todos éramos ateos a muerte y pro-ciencia a muerte. Ni creíamos en dioses, ni en espíritus ni en religión alguna. En total éramos 5, 4 de los cuales nunca habíamos hecho la ouija y tampoco creíamos en ella antes de hacerla.