Pongo esta noticia por la discusión que hubo en su momento sobre si la mujer de Lavandera se había ahogado solita o con un empujoncito de ayuda (no hay mayor ciego que el que no quiere ver).
El que no sepa leer puede cerrar el hilo directamente, en vez de postear algo del estilo "esque mi capacidad no va más allá del sms", "resúmemelo", "p0rp0co leo algo sin dibujitos", etc.
EL CONFIDENTE QUE AVISÓ EN 2001 DE LAS BOMBAS CON MÓVILES
Lavandera recibe en su buzón las fotos más terribles de la autopsia de su mujer
Francisco Javier Lavandera, el confidente que avisó en 2001 de que se preparaba un atentado con bombas accionadas con móviles, recibió en su domicilio las fotos más terribles de la autopsia de Lorena, su mujer, que se ahogó en la playa de Gijón.
Según publica hoy Fernando Múgica en EL MUNDO, Lavandera se encontraba con su madre y con su hijo cuando abrió el sobre de color crudo que alguien había introducido directamente en el buzón de su casa. La carta no tenía ni franqueo ni remitente, sólo una frase escrita a mano y en mayúsculas: "Un recuerdo de tu mujer, para que no la olvides".
"Llegábamos a la calle cuando lo abrí. No estaba cerrado, sólo tuve que levantar la solapa, que estaba metida hacia adentro, y me encontré con unas fotos impresas en folios normales", contaba Lavandera.
En el interior, las fotos más terribles de la utopsia de Lorena. "Me quedé helado al ver el contenido. No soy una persona que se asuste fácilmente. Pero aquello sobrepasaba cualquier límite. Hasta los terroristas tienen que tener un límite de humanidad. Sólo una mente asquerosa podía haberme enviado aquello",aseguraba. "Allí estaba Lorena, mi mujer, echada en una especie de mesa de acero inoxidable, abierta en canal, como un cerdo en una carnicería.Tenía todas las tripas fuera, puestas a un lado", narraba el asturiano .
"En la siguiente foto le habían arrancado el cuero cabelludo. Tenía el pelo hacia adelante, el cráneo abierto y se le veían todos los sesos", explicaba el confidente. "Me quedé en blanco. No pude seguir mirando. Mejor dicho, vi que eran tres o cuatro fotos más, pero me era imposible asimilarlas. Ni siquiera puedo recordar su contenido. Miré a mi alrededor. Tuve una pavorosa sensación de peligro, como si los que lo habían hecho estuvieran por allí observando mi reacción".
"Quieren volverme loco, destrozarme antes de que llegue el juicio", se queja el confidente, quien atribuye el macabro envío a la mafia policial cuya negligencia propició los atentados del 11-M.
http://www.elmundo.es/elmundo/2005/05/24/espana/1116891875.html
¿Quién ha sido? (Ah, perdón, que ya da igual).