La gran mayoría de los que estáis aquí habéis crecido con Internet y el boom del gaming, habéis sido partícipes de las posibilidades que brindaba la red en cuanto a entretenimiento (películas, videojuegos, series...) e interacción social. A medida que hemos ido consumiendo dicho entretenimiento, haciéndolo además de manera selectiva, vamos aumentando el nivel de exigencia que le pedimos a lo próximo que se presente ante nuestros ojos, dado que muchos han descubierto libros, películas, música o información en general a la que no hubieran tenido acceso antes de esta era tecnológica.
Con el tiempo se van desarrollando una serie de gustos propios que nos hacen amar cosas que atrapen nuestra atención desde el primer segundo, algo debido al exceso de información al que estamos sometidos y la manera tan fragmentada en la que dicha información se presenta. Si en el pasado existían los manuales de tapa gruesa, las grandes novelas y una dictadura de contenidos televisivos, ahora la gente bucea entre blogs, tweets, juegos indie, gifs y memes; con estos últimos ha emergido toda una subcultura del humor y de las opiniones, la cual hace que los que antes se ponían en evidencia con banales estados en Tuenti o MSN Messenger 7.5, ahora discutan públicamente en Facebook sobre cuál es la mejor película de Kar-Wai, prestando especial atención a la ortografía, o se rían con un humor gráfico punzante cuya fecha de caducidad es una cuestión de días u horas.
¿Ha espabilado el individuo por simple observación de las tendencias que se van dando en la red por parte de sus semejantes y se ha hecho más políticamente correcto, más agudo y selectivo? ¿Ha subido el listón en cuanto a la calidad de los gustos y opiniones vertidos por la gente, u opináis que ésta sigue siendo en general igual de estúpida que siempre?
Un saludo.