El puto amo, sin más.
Molesto por el bloqueo de varias empresas de cemento, el presidente de Rusia se presentó frente a los principales propietarios y responsables de las materias primas para desbloquear la situación de miseria de miles de familias. De este modo, Putin irrumpió en la cementera propiedad de Deripaska, poco después de que 400 de sus trabajadores se manifestaran y bloquearan una de las carreteras principales, en protesta por el impago de sus salarios a consecuencia de la crisis.