Defensa abre en otoño la puja para sustituir los blindados más frágiles
Defensa ultima los detalles para lanzar en otoño, y siempre antes de la vorágine electoral, un concurso que renovará los blindados ligeros más vulnerables. El equipo de Carme Chacón establecerá un acuerdo marco para fijar las especificaciones técnicas de los vehículos 4x4 que irán adquiriendo progresivamente en los próximos cuatro años, según señalan a elEconomista fuentes de la industria conocedoras de la licitación.
La intención es unificar el material para que en la medida de lo posible se utilice el mismo blindado ligero para todos los cuerpos del Ejército. En la actualidad, se calcula que las necesidades de las Fuerzas Armadas alcanzan las 700 unidades, de las que 300 cubren las lagunas de Marina y las restantes 400, las de Tierra. Independientemente, Defensa necesitaría ya varias docenas de estos vehículos para establecerlas en Afganistán lo antes posible. El importe global supera los 300 millones de euros.
Este esperado contrato era la comidilla entre los militares en un acto celebrado a comienzos del verano en el Instituto Tecnológico de La Marañosa, donde se presentó a los técnicos de Defensa y a los de las Fuerzas de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Guardia Civil) el vehículo SandCat, un blindado 4x4 ligero que se perfila como uno de los posibles candidatos.
Las alternativas del mercado
Aunque a priori no es la opción más conocida en el mercado español, las ventajas del vehículo fabricado por la norteamericana Oshkosh Defence es que es el más probado en el teatro de operaciones de Afganistán y cuenta con una alta protección de blindaje antiminas del fabricante israelí Plasan, que se complementa con una configuración de los asientos que minimiza la onda expansiva en una hipotética explosión. La española Quatripole industrializa el vehículo en España.
Otra opción que hay sobre la mesa es la del Lince, que fabrica Iveco. Su principal baza en esta licitación es que Defensa encargó 80 vehículos de estas características y ya operan en Afganistán. El último ataque de los talibanes que acabó con dos soldados muertos fue precisamente a uno de estos blindados.
También se postula el Vamtac S3 Blindado, que ha sido mostrado hace poco al Ejército. Está fabricado por Urovesa, empresa española que cuenta con una histórica relación industrial con Defensa.
El cuarto as es el blindado de la gala Renault Trucks Defence. Se trata del Sherpa 4x4, con el que colaboraría en el programa la empresa española Iturri y que ya ha sido probado en La Marañosa. El repóker lo completa el Hawkei, que fabrica Thales y en cuya industrialización participaría un socio español.
El precio medio de los vehículos ronda los 300.000 euros, aunque depende de la cantidad que se compra, el blindaje que se elige y su armamento. El aspecto que ahora mismo más preocupa a Defensa es el mantenimiento de estos blindados en el mismo teatro de operaciones.
De hecho, las mismas fuentes aseguran que el Ejército está estudiando nuevas alternativas como alquilar a los propios fabricantes de blindados espacios en los cuarteles de las zonas de conflicto, para que se reparen y se mantengan in situ los vehículos sobre el terreno. Este contrato podría ser el pistoletazo de salida de esta nueva modalidad.
Además del Lince, Defensa cuenta con un blindado 4x4 con mayor tamaño. Se trata del RG-31, que también opera en Afganistán. Como ya ha publicado este periódico, la industria también ha hablado con la Dirección General de Armamento (DGAM) para ofrecerle opciones en este segmento. Es el caso del Bushmaster de Thales o del Aravis de Nexter. En caso de pedirse este último, colaboraría en la fase industrial la empresa española GTD.
Paralelamente a este proceso, la industria de Defensa espera también que se avance en el contrato de los blindados 8x8, pero esta licitación, que ya acumula un retraso de dos años, podría volverse a posponer hasta la próxima legislatura.
Bueno mientras España se va a la mierda, al menos los militares estarán contentos. Compremos mas juguetitos , si señor.