Tiene una eslora de 75 metros por 15 de manga y un mástil de 90 metros de altura
Su anterior dueño, Joseph Vittoria, pagó 45 millones de euros por su construcción
El ex presidente de Avis lo alquilaba por 275.000 euros a la semana
Se trata del velero de un solo palo más grande del mundo. Su mástil de 88,5 metros de altura soporta una superficie vélica (la vela mayor ocupa 1.900 metros cuadrados) que cubriría siete pistas de tenis y casi un campo de fútbol. El ex presidente de la compañía de alquiler de vehículos Avis, Joseph Vittoria, encargó construir el majestuoso Mirabella V, una de las grandes creaciones de la industria náutica de todos los tiempos, que en verano navega por el Mediterráneo y en invierno por el Caribe. Ahora el magnate norteamericano ha decidido desprenderse de su joya flotante.
"Después de siete maravillosos años creando el Mirabella V y de otros seis de emocionante navegación, ha llegado el momento de cambiar de tercio", reconocía el armador en declaraciones recogidas por la publicación Superyachts.com. De la operación, cerrada la semana pasada, sólo ha trascendido que el nuevo propietario es un armador privado. Se desconoce así el precio de venta de una embarcación que salió a la luz en 2004 y por la que Vittoria desembolsó 45 millones de euros.
El Mirabella V fue concebido para el disfrute de su armador, de su mujer y de los 12 invitados que pueden pernoctar a bordo de sus 75 metros de eslora. Pero también se trataba de un negocio, ya que el balandro era alquilado por los hombres y mujeres más ricos del mundo. El precio del charter oscilaba entre los 275.000 y los 290.000 euros por semana, dependiendo de si era temporada baja o alta.
Quien tiene la fortuna de subir a bordo, lo primero que encuentra en la popa son dos enormes timones y un cine (para proyectar películas bajo el cielo estrellado). En proa destaca la presencia de dos lanchas que también son empleadas como piscina y jacuzzi. Vittoria aseguraba que, debido a las 10 toneladas de agua que pueden albergar las neumáticas, a veces era necesaria la presencia de un miembro de la tripulación para que ejerciera de socorrista.
Las entrañas del Mirabella V se dividen en dos alturas. En la superior se halla el salón principal y el comedor y a través de una escalera se accede a los camarotes. El centro del velero está reservado para el mando de gobierno interior y para el camarote del armador. A bordo tampoco falta el gimnasio ni la sauna.
Las estancias de los invitados y de la tripulación está en la parte inferior, donde también están todos los juguetes acuáticos que se puedan imaginar: veleros de clase Laser, motos acuáticas, tablas de windsurf, equipo de submarinismo, kayaks...
Una construcción 'faraónica'
El prestigioso diseñador Ron Holland fue el encargado de trazar el velero que deseaba el armador y el astillero inglés Vosper Thornycroft lo construyó. Hicieron falta más de mil personas y 36 meses para que el Mirabella V fuera una realidad.
La mujer del propietario, Luciana Vittoria, tuvo un papel importante en la concepción del velero y detalló exhaustivamente cómo quería que fuera el barco (poco recargado y sin elementos clásicos), tanto por fuera como por dentro.
El mástil, de 90 metros de altura y 15.000 kilogramos de peso, supuso un desafío sin precedentes. El Laboratorio Nacional de Física de Londres necesitó seis meses de investigación para saber cómo había que diseñar un palo capaz de sostener tres toneladas de vela y de resistir una tensión de 36.000 kilogramos. Al final se empleó una tecnología procedente de la industria aeroespacial.
El resultado fue un barco tan descomunal como elegante. Una obra faraónica que ahora cambia de manos.
Ficha técnica Mirabella V
Año: 2004 (reparado en 2007)
Construcción: Vosper Thornycroft (Inglaterra)
Diseño: Ron Holland
Eslora: 75 metros
Manga: 15 metros
Calado: 3,9 (mín.) / 10,86 (máx.)
Mástil: 88,5 metros
Sup. vélica: 1.900 metros cuadrados
Pasajeros: 12
Camarotes: 7
Tripulación: 15
Motor: 2 x MTU 12V2000M70 (2.160 cv)