Veamos, contexto: Fiestas del orgullo en Santander, concierto, multitud de gente por la calle... Estoy con unos amigos de terraceo por la tarde y me escribe el chico Tinder para ver si nos tomamos una ésta noche. Acepto encantada porque ya estoy algo chispilla y no me apetece irme a casa cuando el resto de mis amigas quieren pasar por chapa y pintura antes de salir así que quedamos en un bar de la zona un par de horas después.
Feliz con mi media melopea me presento en dicho garito a la hora convenida y me encuentro con el susodicho, un chico bastante mono, algo menos que en las fotos pero not bad.
Ya empezamos con mal pie porque mi idea era seguir con las cervezas pero Tinder se pide un café y me corta todo el rollo.
Un café a las 22h con el festival eroticofestivo a nuestro alrededor en un bareto de copas.
Me da la risa floja y le digo al camarero que a mi me ponga algo con más sustancia ya que mi cita es un muermo en un intento de picarlo por ver si se anima a seguirme el juego, pero parece sentarle mal así que le digo que era una broma y procedemos a una media hora de conversación rollo entrevista de lo más encorsetada.
Trato de sacarlo a bailar, de que haga un poco el monguer o algo pero el tipo es bastante ameba y yo voy ya como la luz. El contraste empieza a ser preocupante así que me rindo y decido terminarme mi cerveza y acabar con el suplicio para ambos.
En un momento dado, Tinder se va al baño y Camarerosensual se acerca a la mesa riéndose para preguntarme qué tal con el muermo. Mi cara debe ser lo bastante elocuente porque me propone seguir la fiesta con él cuando termine su turno.
Total, que finiquito la cita con la excusa de que mis amigas llegan en seguida y me voy con ellas de party.
A partir de ahí los ríos de alcohol van en aumento hasta que, finalmente, terminamos en el bar de Camarerosensual donde llueven copas y chupitos y, como no podía ser de otro modo, terminamos liándonos como adolescentes y el resto es historia. XD