Pues yo ayer quedé con la Charmander una vez más. Cada día me llamaba indistintamente desde cualquiera de los 4 móviles entre los dos números suyos y 2 de sus compañeras de piso y al final recapacité y decidí darle otra oportunidad a ver si esta vez surgía el feeling tras tantos días bloqueando y desbloqueando.
Total, la idea era ir al centro comercial aprovechando que tenía que comprar unas cuantas cosas y hablar un poco de las ideas de futuro que tiene, sus gustos, etc. porque no hace más que decirme que quiere una relación. Pues bien, llegué con el coche al parque de su portal, y sin bajar porque llovía a saco le mandé un WhatsApp avisando que ya había llegado. Al de unos minutos bajó y en cuanto se metió en el coche empezó a mirarme y sonreir y a decirme que me había echado de menos y por qué no contestaba a sus llamadas. Le dije claramente que no me parecía normal esa obsesión y que había muchas cosas que me echaban para atrás y como quien suda de lo que le estás diciendo, cogió y se acercó a comerme la boca. El filetazo fue del orden de 15 minutos y cuando ya paró el ansia, me separé y le dije:
- Qué, ¿nos movemos ya? Porque esto no es en lo que habíamos quedado.
Momento en el que me echó mano al paquete y empezó a ponerme cerdo otra vez. Al final ni compras ni pollas, le pregunté si había gente en su casa y me dijo que sí, que estaba su amiga con el novio. Les mandó un whatsapp a ver qué iban a hacer y si iban a bajar pronto y le dijeron que en 10 minutos salían. Total, que 10 minutos aguantando aquella "agonía" con todos los cristales empañados hasta que le dieron luz verde y subimos.
Le dije claramente que nada de magreo porque no estaba seguro del todo de estar ya bien y que la idea era hacer algo light y ver un rato la tele charlando. Pues nada, fue subir a casa, sentarnos en el sofá de la sala y tardar cero coma en empezar a sobarme los pezones, que sabe que me pone cerdísimo. Me cogía la mano y se la ponía en los pechotes para que amasara bien aquello y en resumen, que me estaba poniendo más caliente que la moto de un hippie. Se me puso encima (con ropa) y empezó a moverse como si me estuviera follando y a ponerme los pechos en la cara y cuando notó que estaba duro aquello se quitó de encima y se me puso a intentar quitar el cinturón. Momento en el que le dije:
- ¿Ya sabes lo que te he dicho no?
Asintió y se sentó a un lado mientras me lo acababa de quitar yo y se puso a sacudirme la sardina con los pantalones por los tobillos. Pues en una de estas que cierro los ojos, metió cuello al badajo.
Y lejos de quitarse empezó a mamarla con más fuerza y se puso de rodillas delante para estar más cómoda. Yo estaba todo nervioso en plan, "bueno tío, tú se lo has dicho ella sabrá lo que hace" y nada me relajé y disfruté del momento hasta que me fui a correr. Pensaba que se iba a apartar al menos para no jugársela tanto pero qué va, me apretó fuerte las piernas para que no me moviera y succionó hasta el último puto espasmo que me dio.
Se levantó, se fue al baño a echar la papilla y yo me quedé ahí, flipando, medio tirado en el sofá con los vaqueros por los tobillos y sin entender nada. Volvió del baño, me cogió de las manos, me ayudó a levantarme y se agachó a subirme los pantalones, como si fuera un puto impedido colega y aprovechando que se agachó una última chupadita para quitar el liquidillo que queda.
Asustado el nivel de servidumbre que tienen en su cultura, en serio. Luego ya vimos una mierda infumable que le gustaba a ella de peña que se casa sin conocerse y todo el rato acariciando y preguntando si quería tomar algo y tal. Dicho así piensas, joder, y qué más quieres, pero en realidad lo siento todo vacío no sé... no hablamos prácticamente nada y a mí una tía con la que no me parto la polla y hay feeling no me motiva (para algo más se entiende).
Total, que definitivamente le he dicho de una forma más brusca de lo que suelo que gracias y hasta siempre.