A Jonas Ginter, fotógrafo aficionado alemán le apasionaban los mini planetas en 360º. Y, además, los timelapse. Así que durante dos años ha estado dando vueltas en su cabeza a cómo podía combianar una cosa con otra. Finalmente, lo ha conseguido. Y el resultado es, como poco, sorprendente.
Que cosa más guapaaaa