Personalmente creo que hay dos problemas fundamentales a la hora de pretender restringir el derecho a voto de según qué personas. Serían: ¿Qué baremo aplicar? y ¿Quién estaría en disposición de aplicarlo?.
Tú te ves superior a la Esteban en cuestión de preparación, conocimientos e interés por la política en general, pero, sin duda, habrá quien se vea incluso superior a ti en todos esos aspectos. Por tanto, ésa persona querrá hacer lo mismo contigo y denegarte el derecho a voto.
Siguiendo esta cadena, al final, votarían cuatro y la vida de millones de personas estaría en sus manos. Visto de alguna manera, puede que esas mentes menos preparadas, educadas o menos interesadas en la política sean las que desequilibran el poder de esos lobbys que pretenden controlar nuestras vidas.