Básicamente, desde el 15-M hay manifestaciones, concentraciones, y grupos de personas que opinan libremente en las calles de nuestras ciudades, de hecho amigos y compañeros de clase han participado y me han hablado de ello. Me parece bien pero nunca he ido a una manifestación y sinceramente cuando las he visto por la tele me parecían que no sirven para nada. Pero de unos días para acá, me he dado cuenta que siempre que hay manifestaciones llega la policía he intenta a golpe de porra y puñetazos controlar a los manifestantes.
Evidentemente algunos de ellos o amigos de esos manifestantes intentan proteger ayudar a sus colegas y hacen cara a la policía. Al otro día estas personas que defendían su propia integridad física son condenados por hacer cara a la policía por el político de turno al día siguiente en el telediario.
Evidentemente está “mal” ocasionar altercados y enfrentarse a la policía, pero evidentemente yo en la situación esa en la manifestación también me defendería de un individuo uniformado que se hace llamar policía y está intentando alcanzar mi cabeza con su puño.
Y nada, era decir que siempre que pasan estas cosas esta el político criticando la actuación de los ciudadanos y justificando la violencia policial pero nunca ponen la versión de los manifestantes en los telediarios más relevantes en España, es decir, dan solo la versión de un lado. Y ello me ha despertado las ganas de salir en la próxima manifestación.
La violencia policial volvió a hacer acto de presencia ayer en la concentración de repulsa por la actuación policial del día anterior tras la marcha laica.
El periodista que le pegan luego explica en su blog lo que sucedió http://danielnuevo.com/blog/solo-por-informar/
Esto es indignante. Ahora mismo están los políticos a un lado y los ciudadanos al otro, en medio, la policía. Si esto sigue así lo único que se conseguirá es crispar a los ciudadanos. Y policías son miles ciudadanos somos millones.