La apuesta de Vox es clara: eliminar todos los cuerpos policiales autonómicos y recentralizar las competencias en Policía Nacional y Guardia Civil. Pero el foco del partido de Santiago Abascal no sólo se centra en Ertzaintza o Mossos d'Esquadra; también pretenden la supresión de la Vigilancia Aduanera, el cuerpo dependiente del Ministerio de Hacienda dedicado principalmente a la lucha contra el narcotráfico.
Las cifras de la Vigilancia Aduanera hablan por sí solas. En el año 2017 -la memoria más reciente publicada por el organismo-, sus agentes]decomisaron 21.311 kilogramos de cocaína, 33.346 de hachís, 2.722 kilos y 137.140 plantas de marihuana y 328 kilos de heroína, entre otros. Además, llevaron a cabo algunos de los golpes más significativos en delitos relacionados con la propiedad intelectual, la Hacienda pública o el blanqueo de capitales, entre otros.
La propuesta de Vox queda recogida en un documento que figura en su servidor, aunque no es accesible a través de su página web. Titulado con el nombre de Ponencia sobre la política de Defensa y Seguridad interior, propone un decálogo de medidas relacionados con la materia.
La primera de ellas apunta a la "unificación" de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: "Se procederá a la disolución de las policías autonómicas y demás unidades de seguridad como la de Vigilancia Aduanera o policía portuaria, entre otras. Se reforzarán la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía con la incorporación de los medios humanos y materiales provenientes de las unidades disueltas, previos los cursos de adaptación correspondientes y respetando sus condiciones laborales y empleo".
El Servicio de Vigilancia Aduanera desempeña su función en todo el territorio nacional, incluido su espacio aéreo y sus aguas. Integrada en la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), sus agentes centran sus esfuerzos en combatir delitos relacionados con el narcotráfico, el contrabando, fraude fiscal y blanqueo de capitales. Uno de los principales activos que manejan son sus bases de datos, con información especialmente sensible que emplean para dar sus golpes.
La Agencia Tributaria es blanco de diversas críticas desde las filas de Vox. Si en aquel documento recogen su idea de eliminar el Servicio de Vigilancia Aduanera, la semana pasada fue Victor González Coello de Portugal, vicepresidente primero del partido, el que arremetió contra la institución.
"La Agencia Tributaria se ha convertido casi en la Gestapo", aseveró González en un debate organizado por El Economista, en el que candidatos de diversos partidos presentaron sus propuestas económicas. El comentario llegó cuando el vicepresidente primero de Vox planteaba un pago de impuestos "para tontos": "No creo que todo el mundo que está siendo investigado de forma salvaje seamos malos".
"El decir que la Agencia Tributaria es la Gestapo me parece un insulto", le respondió Francisco de la Torre, portavoz de Hacienda de Ciudadanos en el Congreso. "Yo estoy muy orgulloso de ser inspector de Hacienda y la inspección de Hacienda en España aplica las leyes fiscales democráticas que nos hemos dado todos. No es la Gestapo. Esto es un insulto a los funcionarios de la Agencia Tributaria".