La negativa del alcalde socialista de la localidad coruñesa de Sobrado dos Monxes a recibir a 40 inmigrantes procedentes de Canarias que el Gobierno pensaba reubicar allí durante un mes ha llevado al Ejecutivo a un cambio de planes y finalmente han empezado a trasladarse a otro pueblo gallego, O Porriño, en Pontevedra.
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha confirmado este martes lo que era un rumor ya desde la tarde del lunes, cuando empezó a hablarse de que los 40 inmigrantes de Sobrado dos Monxes se irían a otro municipio. Finalmente, será en uno gobernado por el PP, O Porriño.
Pedro Blanco visitaba este martes ese municipio pontevedrés para visitar la Compañía Española de Algas Marinas (CEAMSA) y, en declaraciones a los medios, confirmó la llegada. En la tarde del lunes, desde la Delegación del Gobierno no confirmaban ese cambio de planes, pero ahora ya es oficial.
En las últimas horas, la Xunta de Galicia mostraba su malestar por la falta de información del Gobierno sobre el asunto. El delegado les responde, criticando que la Xunta y "algunos alcaldes" no muestran "ninguna solidaridad" con la crisis migratoria. El Gobierno gallego niega esa falta de empatía y centra sus críticas en el "oscurantismo" y la "falta de información".
El alcalde de Sobrado dos Monxes, Lisandro Santos, por su parte, se ha negado a acoger a 40 inmigrantes por una cuestión de "logística" y "falta de capacidad" en un municipio de su tamaño para dar la bienvenida a un número tan elevado de personas. También se ha mostrado muy crítico el alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, del Partido Popular. A este municipio estaba prevista la llegada de 350 personas y finalmente serán menos de 100, según los datos facilitados por Pedro Blanco.
El delegado del Gobierno en Galicia defiende que estos traslados desde Canarias son "legales y ordenados" para atender a "la demanda del Gobierno canario" y explica que "por este tipo de ruido, por parte de la Xunta, así como por algunos alcaldes, hubo que hacer este tipo de cambios".
"No es de recibo que el PP en este sentido esté bajo la apariencia o disculpa de que no hay información, que la había clara y constante, y ponga, de alguna manera, palos en las ruedas para echar una mano para aliviar la presión que se estaba produciendo en Canarias", opina el delegado del Gobierno.