#62 Al final esto es muy simple: si me obligan a poner parte de mis ingresos en una caja, prometiéndome que si cumplo condiciones draconianas (37 años y 9 meses de cotización y tener una media de cotización superior a la máxima durante los últimos 25 años de vida laboral) me lo van a devolver ajustado a inflación, si el estado cambia las reglas del juego y me quita la mitad del dinero de la caja me voy a radicalizar.
Lo ideal es que dejen de obligarme a meter dinero en la caja, pero tampoco es justo que roben a los que llevan haciéndolo toda la vida. Bastante es que parte de esas cotizaciones se las lleva el estado otra vez por el IRPF.
Las no contributivas son las que precisamente más se deberían revisar. Se trata de gente que no ha cotizado y ahí está, recibiendo dinero y ayudas. Comprensible en la época de la mujer ama de casa, pero un cachondeo cuando pensamos en los colectivos que reciben chorrocientas paguitas durante toda su vida, y luego otra más.
Las arcas del estado se arreglan promoviendo la inversión extranjera y la creación de empresas, haciendo que se reduzcan así los perceptores de ayudas y aumente la recaudación, pero tenemos subnormales al votante y retards que los votan. Cero conocimiento financiero de la población y los políticos que gobiernan.