La National Security Agency (NSA) de EE. UU., organismo que se encarga de velar por la seguridad del territorio norteamericano, ha protegido a los inocentes ciudadanos de su territorio directamente desde mundos virtuales como World of Warcraft y Second Life.
Según publica New York Times, la NSA infiltró espías en estos mundos virtuales para luchar contra la amenaza mayúscula de la nación, el terrorismo. “Los espías se crearon personajes virtuales para reclutar informantes”, explican en el periódico.
El objetivo de la NSA no era otro que interceptar posibles conversaciones o intercambios de información en estos mundos virtuales que pueden servir como “entornos seguro” para terroristas que planifican ataques a través de sus herramientas de comunicación.
La vigilancia de videojuegos no solo se limita al multijugador masivo de Blizzard que cuenta con casi diez millones de jugadores y al simulador social de Linden Lab, sino que también se expande a Xbox LIVE, el servicio de Microsoft, según la documentación expuesta.
Con todo, no se tienen detalles sobre cómo la NSA y otros organismos como la C.I.A. o el F.B.I. se han infiltrado en estos videojuegos, por lo que se desconoce si han podido acceder a datos y conversaciones privadas de sus jugadores repartidos por el mundo.
