Me bajé el Elysium para jugar un rato y recordar viejos tiempos, hacía como 5 años que no abría un juego pirata de vanilla y hace más de 10 años que no duraba más de 10 minutos, tengo sentimientos encontrados.
Elegí hunter, que fue la primera clase con la que pasé de nivel 40 en vanilla, al recibir la primera quest y ponerme a matar puercos, sentí mucha diferencia al wow actual... Para matar al mob, tenía que strafear y parar al siguiente autoattack del arco, tenía que clavar el momento porque sino acababa a melé con raptor strike y se hacía una odisea matar al bicho, cada mob contaba, y la quest entera era una odisea, te podías quedar atascado en la cueva si tardabas demasiado en matar a los mobs y respawneaban detrás tuyo, un druida lvl 4 me metió el buffo y nos hicimos amigos.
Me divertía con cada quest, cada level nuevo implicaba augmentar las skills de bow y daga, pegaba más fuerte y me creaba una sensación de mejorar, compraba nuevas habilidades y ninguna era trivial, pensaba en comprar algunos items blancos del vendedor para aguantar más sin restear, sentí como que había vuelto a un juego antiguo que en su día me dio muchas alegrías y muchas decepciones, en ningún momento pensé en estar jugando a world of warcraft actual.
Sin duda volvería a jugar a vanilla si tuviera el tiempo que tenía, es una pena que ahora no disponga del tiempo suficiente para disfrutar como disfrutaba antes, era un juego que requería demasiado para muy poca recompensa, también sería una pena que hicieran un vanilla classic v2 y no reviviera estas sensaciones, sería como blasfemar
Hablando del tema social, me acuerdo de ir un día a zaragoza con mis padres, con 16 años, entrar en un bar de noche y encontrarme a unos tíos que jugaban al wow, uno de ellos resultó ser mi compañero de party, llevabamos hablando años