· El anterior alunizaje controlado de una nave fue el de la sonda soviética Luna 24, de la extinta URSS, el 18 de agosto de 1976.
· China es el tercer país que lo logra, a través de su sonda Chang E3.
· Fue lanzada desde la base aérea de Xichang (noroeste del país) el pasado 2 de diciembre.
La sonda no tripulada china Chang E3, portadora del robot explorador Yutu, aterrizó este sábado en el cráter lunar Sinus Iridum (Bahía de los Arcoiris), lo que convierte al país asiático en el tercero (tras EE UU y la URSS) en lograr un aterrizaje controlado en la Luna, 37 años y cuatro meses después del anterior.
Chang E3, lanzada desde la base aérea de Xichang (noroeste del país) el pasado 2 de diciembre, y que orbitaba a una velocidad de 1,7 kilómetros por segundo, comenzó a desacelerar cuando se encontraba a 15 kilómetros de la superficie lunar y alunizó con éxito este sábado (13.12 GMT, las 14.12 hora peninsular española).
El anterior alunizaje controlado de una nave fue el de la sonda soviética Luna 24, de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, el 18 de agosto de 1976.
Con un peso de 140 kilos, el robot puede desplazarse a 200 metros por hora y está equipado, entre otras cosas, con cuatro cámaras y dos brazos móviles que pueden extraer muestras del suelo lunar.
Su llegada a la luna
La maniobra, que fue retransmitida en directo por varios canales de la televisión estatal china CCTV, duró 12 minutos, en los que el aparato descendió describiendo una parábola hasta que se situó a unos 100 metros de la superficie del satélite, momento en el que planeó suavemente hasta posarse, sin apenas levantar polvo lunar.
Durante su acercamiento a la Luna, la Chang E3 —bautizada en honor a una diosa que según leyendas chinas vive en la Luna— ofreció imágenes muy nítidas de la superficie lunar, ayudada por la ausencia de atmósfera y por encontrarse en la cara iluminada del satélite terrestre.
Los encargados del programa espacial chino eligieron Sinus Iridum debido a su superficie llana, que facilitará el desarrollo de las comunicaciones y que el robot espacial reciba luz solar suficiente para sus baterías, y a que se trata de un área de la Luna aún no explorada.
Pocos minutos después de posarse en la Luna, la Chang E3 desplegó paneles solares con el fin de acumular la energía necesaria para, en unas horas, poder desplegar en la superficie selenita el robot móvil Yutu (Conejo de Jade).
Durante su misión, instalará un telescopio en la Luna por primera vez en la historia, observará la plasmaesfera (gas ionizado que circunda la Tierra) y examinará mediante radar la superficie del satélite.
El país asiático busca a largo plazo llevar astronautas al satélite terrestre, y aunque todavía no hay una fecha fijada para ello se espera que sea hacia 2020, época en la que China también espera tener una base espacial permanente orbitando la Tierra.
Fuente: 20minutos.es