Curiosa noticia que me he encontrado hoy en El País con título bastante sensacionalista, pero como veo que se publica en PNAS, una revista poco sospechosa de incluir artículos con poco rigor científico, abro este hilo.
By combining large datasets from three national panels, we confirmed the effect that firstborns score higher on objectively measured intelligence and additionally found a similar effect on self-reported intellect. However, we found no birth-order effects on extraversion, emotional stability, agreeableness, conscientiousness, or imagination.
Personalmente destacaría 2 factores a tener en cuenta referentes al artículo y la noticia
El primero de ellos es lo trascendente que es el ambiente a la hora de determinar infinidad de hechos a lo largo de nuestra vida, dejando aparcada aquella leyenda de que todo viene determinado por los genes.
La segunda es que me parece extraño que la inteligencia sea el único rasgo que sale significativo, porque es posiblemente el más complicado de cuantificar si lo pd. comparamos con empatía, estabilidad emocional, etc. De hecho no se hasta que punto podemos afirmar que lo que cuantificamos es algo tan abstracto como la inteligencia de una persona.
Además creo que hoy en día todavía existen fuertes presiones culturales sobre el primogénito que puede hacer que al final acabe estando mucho mejor preparado simplemente por la presión social.
PD: Soy primogénito así que rendiros a mis pies.