Me esperaba mucho más de la segunda parte.
Me ha parecido predecible en exceso, con personajes llenos de estereotipos y lenta. Los actores que interpretaban a los humanos eran totalmente planos. No puedo salvar ni a Gary Oldman.
Los actores encargados de interpretar a Caesar y a Koba, fantásticos. Ambos han conseguido transmitirme en todo momento sus sentimientos.
Por lo demás, para mí está bastante por debajo de la anterior película. Con la primera parte estuve mucho más enganchado a la pantalla. La conexión emocional entre el humano y el simio era fascinante. El proceso en el que Caesar se revela es mucho más rico en matices y la trama está mucho mejor trabajada y conseguida. A mi me transmitió muchísimo más.