demasiado avispado! ¬¬
me encanta este tipo de posts, por suerte el tiempo pone a cada uno en su sitio, cuanto bocas suelto hay por el mundo ains xDD
Que risa ver esto xDDD. No se si hay algún post mio por aquí sobre Guardiola, pero voy a reconocer que al principio no me convencía.
En #199 Dejé mi huella. Dios que risas me estoy pegando.
Por cierto, esta tarde resucito el hilo de beckham, que lo prometí en su día.
Por cierto, a ver si alguno se enrolla y traduce éste artículo:
All roads lead to Rome, even in Scotland. FC Barcelona may wish to pay homage to Caledonia for it was there that this historic season began – with the voice of Josep Guardiola echoing round their pre-season training camp at St Andrews. For Barça's players there was no respite and nowhere to hide. When Xavi Hernández, Carles Puyol and Andrés Iniesta joined the squad following Euro 2008, they could hardly believe the transformation, the sheer intensity.
"Pressure" was the word, a mantra. "Pressure! Pressure! Pressure!" Guardiola demanded that his team play high, asphyxiating the opposition. Pulling Leo Messi aside, the new Barcelona coach told him that it was all very good being the best with the ball, he had to be the best without it too. The opposition must be offered no way out. A possession game – Barcelona's game – requires you to win possession in the first place.
Winning the ball is Guardiola's obsession. This summer he will lecture at a coaching conference. Forget pass-and-move, the title is Recovering Possession. After a pre-season match with Hibs he revealed that his first session had been dedicated to it. After the season's opening match he was furious, not because Barcelona had lost to Numancia but because his players had not followed orders – because they failed to pressure their opponents.
It did not happen again: Barcelona's strikers have committed more fouls than any of their defenders, Dani Alves apart. According to Johan Cruyff – Dream Team coach, Barça ideologue and the man whose philosophy Guardiola admits trying to emulate – pressuring high limits the amount of running players must do. When you win back the ball, he explains, there are 30 metres to goal rather than 80. "I want Messi as far forward as possible," Guardiola adds.
Intelligence and positioning are vital: Guardiola told Seydou Keita to run less but run brighter. And yet there is no escaping the intensity. Privately Thierry Henry says he has never worked so hard. At the start of the season Guardiola stressed his side would "respect our philosophy". He has also respected the profession.
The mistake many made was concluding that a commitment to creative possession football inherently means turning your back on hard work and discipline, on pragmatism and competitiveness; that the aesthetic is by definition incompatible with the effective. Guardiola is every bit as meticulous as, say, Rafa Benítez; every bit as much of a control freak; every bit as pragmatic. And he is every bit as determined to win. As the eulogies poured forth for the way Barcelona were now playing, he kept repeating the same message: "It will be meaningless if we win nothing." He meant it.
Guardiola's first season has challenged the clichés. Experience is not age, it is learning how to confront and resolve problems. Defending is not just about building a wall and stopping the opposition getting close to your goal; it can also be about keeping possession and stopping them getting close to the ball. Bravery is not just launching into risky tackles, it is also remaining committed to a risky style. Playing prettily and playing to win are not necessarily mutually exclusive – certainly not when you have these players.
Guardiola knows there are risks to Barcelona's game but believes the benefits outweigh them, that there is no contradiction between style and competitiveness. He can think of no more practical way of playing than the way his side plays. Luis Aragonés once claimed that "cup finals aren't for playing, they're for winning". Asked if he agreed, Guardiola grimaced. "They're for winning," he conceded, "but I don't see how you can win without playing."
Guardiola has done the things normally considered effective too. And why, he would doubtless respond, would he not? At 38, in his first ever season, he has built a team playing creative, technical football – a resilient, united, tough team that has won everything there is to win. The day he told his staff they would win the league wasn't the day they stuffed Madrid 6–2 but when they came back from two down to draw 2–2 with Betis.
He has built a team that is fitter than it has ever been; one that sits through videos, that analyses its rivals, that rotates; one that works on the defence; one that practises set plays.
It is one with talent, of course. Barcelona always had talent. But of Rome's starting XI, only one – Gerard Piqué – was not there last season when Barcelona finished empty-handed, 18 points behind Madrid. That failure bequeathed Guardiola a receptive, hungry dressing room. "We had," Rafa Márquez confesses, "let ourselves go." The new coach was determined for it not to happen again. Young, handsome, something of a loose cannon, Piqué in particular has noted the coach breathing down his neck.
Guardiola has shown remarkable communication skills, an impressive ability to connect to his players. His message is strikingly unambiguous. He has imposed discipline and rules – six players were fined the day after the Copa del Rey final for arriving one minute late to training. And he has played to Barcelona's strengths: a footballing identity running right through the club that he learnt from Cruyff and Xavi and Iniesta learnt from him. "I would never have won anything this season without these players," Guardiola said in Rome. And those players might never have won anything without him this season, either.
Podría pero NO lo voy a hacer...
Lo he leido y q manera de comerle la polla a Guardiola xD. Ese tio está enamorao xD.
#403 Es que allí, donde está grim, no está el manchester united. Están metidos él y el Real Madrid.
Yo no necesito ninguna cueva. Yo doy la cara y sin ningún problema.
Estoy orgulloso de ser madridista tanto en la victoria como en la derrota!.
Si hubiera ganao el Manchester el avatar habría desaparecido tb hoy.
Eh que yo tampoco estoy en ninguna cueva eh! Aqui estoy con dos cojones xDDDD, comiendo mierda a mansalva pero bueno xD
Ahora parece que yo soy el único que la cagó, cuando en las primeras páginas se puede leer que el 90% de la gente estaba de acuerdo conmigo xDD
Es que es normal que pensaramos así, un equipo que venía de hacer el ridiculo y que tenía la mentalidad por los suelos iba a ser dirigido por un tio que venía de Tercera División con más pluma que la pantoja de Puerto Rico, lo único que podías pensar es que esto se hundiría más todavia, aunque por suerte ha sido justo lo contrario.
El dia que me encuentre a Pep por la calle se lo diré, le pediré disculpas y besaré el suelo por el que pisa. Ha hecho TODO bien, un crack.
He hecho una traducción media. Tiene cosas adaptadas y desde luego cosas mejorables, pero a grandes rasgos se puede entender lo que quiere decir el que lo escribió:
Todos los caminos llevan a Roma, hasta en Escocia. Puede que el FC Barcelona quiera hacerle un homenaje a Caledonia por ser allí donde empezó esta temporada histórica con la voz de Josep Guardiola resonando en el campo de entrenamiento durante la pretemporada en St Andrews. No daba respiro a los jugadores del Barça, que no tenían donde esconderse. Cuando Xavi Hernández, Carles Puyol y Andrés Iniesta se unieron al grupo tras la Eurocopa 2008, difícilmente imaginaban una transformación tan radical.
"Presión" era la palabra, el mantra. "¡Presión! ¡Presión! ¡Presión!". Guardiola pedía a su equipo jugar arriba, asfixiando al rival. Hablando con Leo Messi, alejados del resto del grupo, el nuevo técnico del Barcelona le dijo que estaba muy bien ser el mejor con el balón, pero también tenía que serlo sin él. El rival tenía que quedarse sin salidas. El juego de posesión -el juego del Barcelona- requiere que tengas la posesión del balón por encima de todo.
Tener la posesión era la obsesión de Guardiola. Ese verano iba a dar una charla en una conferencia de entrenadores. Olvida el "pasa-y-muévete", el título es "Recuperar la posesión". Tras un partido de pretemporada contra el Hibs (Hibernians), desveló que su primera sesión se había dedicado exclusivamente a éso. Tras el partido inaugural de la liga estaba furioso, no porque el Barcelona hubiese perdido contra el Numancia, sino porque sus jugadores no habían seguido sus instrucciones, porque fallaron en la presión al rival.
No volvió a pasar nunca más: Los delanteros del Barcelona han cometido más faltas que cualquiera de los defensas, excluyendo a Dani Alves. Dice Johan Cruyff -entrenador del Dream Team, ideólogo del Barça y el hombre del que Guardiola admite intentar emular su filosofía- que presionar arriba reduce la distancia a recorrer por los futbolistas. Cuando tienes la posesión del balón, explica, estás a 30 metros de la portería, en lugar de a 80. "Quiero a Messi lo más arriba posible" añade Guardiola.
El posicionamiento y la inteligencia son vitales: Guardiola le dijo a Seydou Keita que corriese menos pero con más brillantez. Y sin dejar de lado la intensidad. En privado, Thierry Henry dice que nunca ha trabajado tan duro. Al principio de la temporada, Guardiola hizo hincapié en que tenían que "respetar su filosofía". También respetaba su profesión.
El error de muchos fue llegar a la conclusión de que proponerse crear un fútbol basado en la posesión conlleva pasar del trabajo duro y la disciplina al pragmatismo y el espíritu competitivo; que la estética es incompatible con la efectividad por definición. Guardiola es tan meticuloso como, por ejemplo, Rafa Benítez; tan "friki" del control como él, tan pragmático como él. Y con la misma determinación por ganar que él. A pesar de todos los elogios que recibía el Barcelona por su forma de jugar, él seguía repitiendo siempre lo mismo: "No tiene sentido si no ganamos nada". A eso se refería.
La primera temporada de Guardiola ha rozado la perfección. La experiencia no es un grado, es aprender a enfrentarte a los problemas y resolverlos. Defender no es sólo levantar un muro y evitar que el rival se acerque a tu portería; también puede significar mantener la posesión y evitar que el rival se acerque a la pelota. El valor no es sólo hacer entradas arriesgadas, sino también tener un estilo de juego arriesgado. Jugar bien y jugar para ganar no tienen por qué estar enfrentados, no cuando tienes estos jugadores.
Guardiola sabe que el juego del Barcelona conlleva riesgos, pero cree que los beneficios compensan esos riesgos, que no hay ninguna contradicción entre "estilo" y "competitividad". No se le ocurre una manera más práctica de jugar que como lo hace ahora. Luis Aragonés dijo una vez que "las finales no se juegan, se ganan". Cuando le preguntaron si estaba de acuerdo, Guardiola hizo un gesto. "Están para ganarlas", dijo, "pero no sé cómo vas a ganarlas sin jugar".
Guardiola también ha hecho cosas que generalmente se consideran efectivas. ¿Y por qué -respondería sin dudarlo- no va a ser así? Con 38 años, en su primera temporada, ha construido un equipo que conjuga creatividad y técnica. Un equipo unido, fuerte, que ha ganado todo lo que podían ganar. El día que Guardiola le dijo a su staff que ganarían la liga no fue el día que arrasaron al Madrid 6-2, sino cuando volvieron de empatar 2-2 contra el Betis.
Ha construido un equipo más mentalizado que nunca; uno que se sienta a ver videos, que analiza a su rival, que rota; uno que trabaja en defensa; uno que ensaya jugadas de estrategia.
Es un equipo con talento, por supuesto. El Barcelona siempre ha tenido talento. Pero del once inicial de Roma, sólo uno, Gerard Piqué, no estaba en el Barcelona que se quedó en blanco la temporada pasada, a 18 puntos del Madrid. Ese fracaso dejó a Guardiola un conjunto receptivo, con hambre. "Nosotros", confiesa Rafa Márquez, "nos dejamos ir". El nuevo técnico tenía claro que eso no volvería a pasar. Joven, apuesto y duro cuando hay que serlo, como ya ha podido comprobar Piqué.
Guardiola ha mostrado una remarcable capacidad de comunicación, una increíble capacidad de conectar con sus jugadores. Su mensaje es inequívoco. Ha impuesto disciplina y unas reglas -seis jugadores fueron multados el día después de ganar la final de la Copa del Rey por llegar un minuto tarde al entrenamiento-. Y ha aprovechado los puntos fuertes del Barcelona: una identidad futbolística que ha ido pasando por el club cuando él la aprendió de Cruyff y ahora Xavi e Iniesta la aprenden de él. "No habría ganado nada esta temporada sin estos jugadores", dijo Guardiola en Roma. Y esos jugadores probablemente tampoco hubiesen ganado nada esta temporada sin él.
no sé si será cosa mía pero creo ke el efecto guardiola se ha notado
abel.. pocchetino.. nogués, pacheta..
en el newcastle tmbn trajeron a un jugador mítico
incluso poner a maradona, ke ya creo ke es casualidad eso sí, un hombre ke de entrenar sabe lo justo, más como un motivador ke otra cosa
de todos estos pocchetino es el único indiscutiblemente triunfante, seguido por Abel ke tampoco ha cambiado el mundo pero ha cumplido bastante decentemente (peor en champions ke aguirre, en liga mejor contra los grandes)
supongo ke en el futuro se valorarán más cosas que la carrera o los títulos conseguidos, pero es complicado adivinar cuando es mejor apostar por guardiola y cuando mejor apostar por moruinho (ahora no hablo de estilos)
¿Pluma? En nada que te pones un jersey modernillo ya eres gay. Me toca la polla que lo digáis en serio, de verdad.
PD: y ser gay no es malo
