La junta directiva del FC Barcelona, encabezada por Sandro Rosell, estudia ceder la demoninación del nuevo Camp Nou para pagar su construcción. De sustanciarse la maniobra de marketing, se ingresarían 30 millones de euros al año. Los recursos extraordinarios se destinarán a sufragar las obras de la futura instalación, valoradas en 600 millones de euros, en caso de que el proyecto reciba luz verde. La fórmula se ha utilizado para construir otras grandes instalaciones deportivas y culturales, como el 02 Arena de Londres.
Rosell ya tiene la autorización de los socios compromisarios para celebrar una consulta en la que se decida el futuro del Camp Nou. Renovar el actual campo costaría unos 300 millones de euros, pero no solucionaría algunos déficits estructurales, y la directiva se decanta por un nuevo campo con capacidad para unos 100.000 espectadores y con espacios mucho más amplios y muchas más zonas VIP que el actual estadio azulgrana.
Allianz Arena y Emirates Stadium
Hace cuatro meses, Rosell se expresó en contra de comercializar el nombre del nuevo campo. En cambio, la directiva se posicionó a favor de estudiar todas las propuestas de 'naming rights' para la construcción de un nuevo Palau Blaugrana, que costaría unos 100 millones de euros y tendría una capacidad para unos 12.000 espectadores. Ahora, y tras evaluar algunos estudios del área patrimonial, el presidente del Barça parece dispuesto a sacrificar un nombre que satisfaga a la masa social del club por una financiación que minimice su coste económico.
El Allianz Arena, del Bayern y el Múnich 1860, y el Emirates Stadium, del Arsenal, son dos modelos que atraen a los dirigentes barcelonistas. En noviembre de 2012, el club londinense firmó un nuevo contrato por cinco temporadas de patrocinio de su campo y las camisetas del equipo de fútbol por 185 millones de euros. Es decir, por 37 millones anuales.
Iberostar paga un millón al Mallorca
También en Inglaterra, el Manchester City ingresa unos 40 millones de euros por temporada de Etihad Airways, que patrocina las camisetas del equipo y da nombre a su estadio (Etihad Stadium), inaugurado en 2002 como City of Manchester. En España, Iberostar paga un millón de euros por comercializar su nombre en el estadio del Mallorca (Son Moix era el nombre inicial).
El Barça, que quiere construir un estadio vanguardista, tiene buenos informes del nuevo Wembley y, sobre todo, del espectacular Cowboys Stadium de Dallas. Inaugurado en 2009, su construcción se disparó hasta los 1.000 millones de euros y puede acoger entre 80.000 y 100.000 espectadores. La directiva azulgrana se interesó por su construcción durante un partido amistoso, en agosto de 2011, que jugó el equipo que entonces dirigía Pep Guardiola.
Tras el Mallorca se va a empezar a importar esta practica de Inglaterra y Alemania
