No es oro todo lo que reluce en el mundo del fútbol. No por lo menos para los futbolistas retirados en Inglaterra. Y es que un estudio realizado por la fundación XPro revela que tres de cada cinco jugadores de la Premier League pasan del lujo a la bancarrota en sólo cinco años por culpa de las malas inversiones y los caprichos.
Estos datos salen a la luz pública después de un estudio realizado a 30.000 exjugadores de la Premier League y con un salario cercano a los 35.000 euros semanales. Y los datos son aterradores. Tres de cada cinco exjugadores se encuentran en las ruina antes de los cinco años de la retirada y uno de cada tres rompen su matrimonio antes del año.
Geoff Scott, director de una fundación cuyo único cometido es ayudar a los exfutbolistas con problemas, desgranó las posibles causas del fracaso económico. “Tres de cada cinco jugadores están en bancarrota a los cinco años de la retirada y uno de cada tres se ha divorciado en doce meses. Se dejan aconsejar por personas equivocadas y toman malas decisiones. El 70 por ciento de las inversiones fracasan y los jugadores de fútbol, con su riqueza y la brevedad de sus carreras, son un blanco fácil”.
Paul Gascoigne puede ser el mejor ejemplo de la dilapidación del dinero en el fútbol inglés. El exjugador de equipos como el Newscatle y Tottenham pudo perder más de 17 millones de euros y su vida va cuesta abajo desde que colgó las botas en 2004.
Además, los medios ingleses se hacen eco del estudio realizado por XPro y citan algunos jugadores, en activo y retirados, que atraviesan serios problemas económicos. John Arne Riise (Fulham), Eric Djemba-Djemba (ex del United) y Brad Friedel (Tottenham) son algunos jugadores que pudieron saborear el lujo y la bancarrota en menos de cinco años.