UEFA Champions League - Octavos de final

Todos a una, Álvaro Negredo, Jesús Navas y David Silva tienen un mensaje para el Barça: «También nos gusta tener la pelota». En ausencia del cuarto mosquetero español del City, Javi García, fue el «veterano» Silva quien adelantó tímidamente la estrategia: «Nuestro objetivo va a ser quitarles mucho la pelota: sabemos que sufren sin ella y vamos a intentar ganarles la posesión», afirmó en la jornada de puertas abiertas de ayer en el Etihad Stadium.

«Nuestro estilo se parece más al del Madrid que al del Barça», advierte por su parte Negredo, que vuelve a decir a las claras lo que ya dijo tras el sorteo: «Es cierto que prefería enfrentarme al Barcelona. Y no lo digo por mi pasado madridista, sino porque creo que habríamos tenido más dificultades en hacer frente a un equipo que juega al contraataque. Al Barça le gusta jugar y retener la pelota, y ese estilo es positivo para nosotros». Reconoce también el vallecano que el Barça no es el mismo de hace un par de años, «pero un equipo así, con esa tremenda calidad individual, nunca perdona», asegura.

Está Negredo que se sale en el estreno en la Premier, y no hay más que ver el vídeo que le dedica el Manchester City (The beast) para entender por qué se ha ganado de una zarpazo el corazón mancunian, en sana rivalidad con Agüero. En seis meses ha conseguido 23 goles en todas las competiciones, uno más que en los dos años que pasó en la factoría del Madrid. «La gente se ha portado genial conmigo desde el primer momento, y eso me ha ayudado a crecer y a seguir mejorando», asegura. «Echo de menos el calorcito de Sevilla y el idioma sigue siendo un poco una barrera, pero me voy defendiendo. A la intensidad del fútbol inglés le tenía bastante respeto, aunque creo que mi juego se ha acoplado bien», comenta.

Pero si alguien está disfrutando como un niño con el ritmo frenético del fútbol inglés es Navas. «La velocidad es lo que me hizo venir aquí, y no me equivocaba», admite el sevillano. «Cada partido es pura electricidad. Yo lo encuentro apasionante. Estoy disfrutando». «Estamos haciendo bien las cosas y lo importante es seguir en esa línea», proclama de cara al encuentro con el Barça. «Funcionamos bien como grupo y llevamos una racha muy buena de cara al gol... La tenemos que saber aprovechar, para que no nos pase lo que el otro día al Sevilla, que tuvo muy controlado el partido en la primera parte y no pudo remachar. Ese es el riesgo que tiene el Barça, con esos grandísimos jugadores que en cualquier momento pueden darle la vuelta al partido».

Insiste Negredo en que el Barça, pese a las concesiones en defensa, parte como favorito incluso en el Etihad, donde este año salieron goleados el Arsenal y el Manchester United. «Seamos realistas: a lo más que puedes aspirar ante el Barcelona es hacerle uno o dos goles», confiesa el delantero, que aún lleva la espina clavada de la última remontada culé (2-3) cuando vestía la camiseta del Sevilla. «Pero si en algo se diferencia precisamente el City es por su habilidad para crear ocasiones y hacer goles», advierte Silva, que ha vivido desde muy dentro la transición de la era Mancini a la era Pellegrini. «Salimos al campo con una mentalidad muy ofensiva, sobre todo cuando jugamos en casa. Y si somos capaces de hacer nuestro juego es difícil frenarnos... Esperemos que algo así le ocurra al Barça».

La Federación ha ofrecido a Real Madrid y Barcelona adelantar la fecha de la final de la Copa del Rey, prevista para el 19 de abril, Sábado Santo. El cambio de fecha estaría provocado por la cercanía de las semifinales de la Champions, sólo cuatro días después. Se buscaría así que los equipos españoles tuvieran más tiempo de descanso, adelantándose a la posibilidad de que estuvieran vivos todavía a esas alturas en la máxima competición. Los finalistas dan por hecho que la sede del partido será en Mestalla, mismo escenario que vivió la última final de Copa entre ambos, en 2011, con victoria para los blancos. El próximo martes, los dos equipos se reunirán con la Federación para matizar la fecha definitiva, que podría ser uno, dos o incluso tres días antes. A pesar de que esta vez sí estaba marcada en el calendario desde principio de temporada, de nuevo la resolución del torneo se envuelve en dudas.