Empezaremos por contar mi historia.
Gamer desde pequeñito, siempre me apasionó el Diablo II. Me comí todos los parches de battle.net junto con las patatitas que me permitía mi madre comprarme en el ciber mientras alternaba entre el susodicho y el counter. Mi viciada llegó hasta límites insospechados, desde tener cualquier personaje full para pvp como hasta tener 2 al 99. Cuando, un porrón de años después, salen rumores de un Diablo III. Altas expectativas. Deseos incalculables de tenerlo. ¿Cómo será? Sale un tráiler. Quiero tenerlo. Más que cualquier juego. Sensaciones nunca vistas dentro de mí. Un año tragándome los vídeos que iban saliendo. Hasta que lo compro el mismo día que sale. Nivel 60.
¡¿¡¡¿¿¡¡¡¿¿WTF???!!?!?!?!?
Pero... ¿¡pero esto qué es?! ¿Ya está?
Le doy unos meses de tregua, y me quito. Vuelvo al D2.
Me gustaría saber, cuánta gente a día de hoy, 4 de junio de 2013, ha sentido y siente esta misma decepción que yo, que después de tantas expectativas saquen un Diablo que tiene más de WoW que de personaje personalizable.
Gracias por leerme.