Buenas tardes.
He ido a comprar y por el camino iba pensando en ciertas cosas de la vida. Una de ellas es la paulatina muerte del MSN. Seguramente muchos pensaréis que el MSN es algo de la prehistoria y lo enterráis por ello, pero se ha perdido algo muy bonito.
Imaginad esos duros días de invierno, donde después de una larga jornada volvemos a casa, nos damos una ducha caliente y cenamos. Después de todo ello nos sentamos en nuestra silla, encendemos el ordenador y nos conectamos a la internet. Años atrás, se mantenían unas buenas conversaciones por el msn. Una horilla u horilla y media antes de meterte en la cama hablando por el msn sentaban genial. Era la oportunidad de hablar directamente con la gente que no podías ver durante la semana porque vuestros horarios no eran compatibles y cada uno tenía sus tareas.
El MSN fue partícipe de buenas conversaciones, unas veces más tontas de risas y otras bastante buenas fructíferas. Incluso conversaciones múltiples.
Pero llegó Tuenti y Facebook y la magia se acabó. Ahora todo es más frío, dentro de la frialdad que ya de por si da hablar por Internet. El MSN medio vacio y todo el mundo en Facebook comentando fotos y poniendo frases sueltas por aquí y por allá. Intentando hablar en ventanas de 5 cm cuadrados... Ya nada será igual.