El rincón del SEXO y la LASCIVIA

Arenas de lujuria

Estamos en una playa, una playa solitaria donde no se distinguen apenas pocos bañistas a lo lejos. Los dos solos, tumbados en la arena caliente, demasiado caliente. ¿Por qué no quitarnos el bañador? Me pregunta él.

Su pregunta me sorprende, me ruboriza un poco el hecho de estar los dos desnudos en la playa, pero me lo planteo. Él me dice que se lo quita pero que yo también me lo tengo que quitar. Le digo que vale, aunque la vergüenza invada mi cuerpo.

Allí estamos los dos, solos y desnudos. Él sigue con las preguntas: ¿Te echo crema?
Me lo pienso un instante y creo que me apetece, el chico me gusta, ¿por qué no? Le digo que sí y me dice que me dé la vuelta. Empieza por la espalda muy suavemente, después pasa a las piernas por la parte de abajo para ir subiendo poco a poco. Llega a mi culo, masajeándolo suavemente con gran cantidad de crema. Cada vez estoy más tensa, las caricias me estremecen cada vez más. Pasa un dedo por la ranura de mi culo, muy suavemente hasta llegar al ano, lo acaricia por el alrededor y sigue bajando… he olvidado que estoy en una playa, que pueden vernos, que estamos desnudos y me está acariciando de tal manera. Me separa las piernas, me acaricia las ingles muy poco a poco, algo que me vuelve loca. Cuando ve que ya no puedo más me dice que me dé la vuelta hacia arriba. Ni siquiera le contesto y me doy la vuelta.

Me echa crema en los pechos y empieza masajearlos suavemente para después ir bajando por el vientre. Me relajo y a la vez me tenso, empiezo a excitarme bastante, sus caricias me pueden. De nuevo me acaricia las ingles y el interior del muslo. Me vuelve a separar las piernas para ello y empieza a tocarme muy sutilmente el coño. Casi no noto sus manos pero la sensación es estremecedora, noto como ya estoy mojada, muy mojada. Él lo nota y me introduce un dedo. A ratos me avergüenzo, a ratos desaparezco del mundo, solo disfruto. Sigue acariciándome, esta vez el clítoris. Casi no me toca pero me muero de placer, no controlo mis piernas, me tiemblan. En un momento que abro los ojos veo su polla muy muy dura y me excita aún más que se haya excitado tanto viendo como disfruto. Le empiezo a acariciar para llegar a su miembro, le hecho un poco de crema y empiezo a esparcírsela como si lo estuviera masturbando. Le gusta mucho porque lo noto en cómo me toca. Cada vez los movimientos son más rápidos, más ansiosos, la delicadeza pasa a un segundo plano para dar lugar a la lujuria, a los impulsos más animales. Demasiada excitación, los dos tocándonos sin tan siquiera mirarnos, los ojos cerrados, concentrándonos únicamente en las sensaciones.

Necesitamos aumentar el ritmo, el cuerpo nos lo pide a gritos, oímos la respiración del otro cómo si se metiera en nuestra cabeza. Empezamos a sentir como llega, como llega el momento tan esperado, el desahogo que los dos necesitamos. Y llega. Mi cuerpo no resiste tanto placer sin explotar, me corro como hacía tiempo que no lo hacía. El gemido que suelto es inconsciente, después me avergonzaré, pero ya será demasiado tarde. Todo está hecho, hemos perdido la voluntad para seguir nuestros deseos más ocultos. Nos estremecemos una y otra vezdespués del orgasmo, todo ha sido demasiado intenso. Su semen está en mi vientre y sus dedos están muy mojados, decidimos ir a bañarnos a la playa para limpiar aquel suceso, como si nada hubiese pasado. Al fin y al cabo era a los que habíamos ido, a pegarnos un baño.

Si algo distingue a estos relatos de los random que hay por Internet, además de la calidad innegable que tienen, es porque están escritos por mediavider@s, lo cual los hace más atractivos .

No habrá más por hoy .

#132 De momento, una decena contando estos.

#142 Como comprenderás, no sé cuál es el tuyo xD. Pero vaya, que si quieres ponerlo tú, sin problema. Eso sí, ponlo si no te importa mañana por la noche que mañana solo postearé uno, así queda más completita.

#108 Oye, sería una idea cojonuda. Grábate en mp3 xD.