A mí la rejugabilidad de Dark Souls o de Bloodborne me parece excelentemente construida porque, sobre todo, gira entorno al lore o a la historia del juego.
En la mayoría de juegos de ahora si te pasas la historia eso no supone mucho más de un 30% o 40% del total del juego, el resto son trofeos, coleccionables, los llamados desafíos en algunos juegos,etc. Y no tendría ningún problema con esto si esos mismos juegos no estuvieran diseñados con el pretexto de contar una historia a través de unos personajes y de un contexto o atmósfera.
Aquí la rejugabilidad está pensada para que, una vez que te hayas pasado por primera vez el juego comprendas mejor la historia, para que puedas organizar en una estructura o línea temporal cada detalle del que te has ido enterando y vayas aprendiendo cosas nuevas. Hay que hacer labor de detective e ir enlazando sucesos y demás. Y si lo haces es porque lo que has visto te ha parecido curioso, te ha llamado la atención y quieres saber más. Ver el juego desde una perspectiva distinta y cuando ése personaje tan enigmático te suelta su frase enigmática y ambigua decir/pensar "¡Coño!, ¿se referirá a esto otro?". Y también llevar por otra vía el transcurso por la historia y ver todo lo que cambia.
Todo eso es mucho más satisfactorio y más bonito que rejugar simplemente por "Tengo que conseguir el platino", "Tengo que conseguir los trofeos de enigma". O "Tengo que seguir leveando la Mother Base", "Tengo que completar 20 misiones genéricas con el rango máximo para...."
En conclusión, ¿estos son los únicos juegos que hacen esto?....No, Silent Hill 2 (2001) por ejemplo también lo hacía, el juego está plagado de secretos, metáforas y sucesos que muy probablemente el jugador va a pasar por alto en un primer run y la sensación de ir completando o comprendiendo cosas no es tan drástica como en Dark Souls o Bloodborne pero sigue siendo muy muy satisfactoria. Es mi opinión, pero si tiene que haber un componente de replay value, prefiero que sea como en estos tres ejemplos y esté hecho como si fuera un libro o una novela. Lo que ves es lo que hay, sin medias tintas, ¿te ha gustado mucho pero quieres enterarte mejor porque no has terminado de entender ciertas cosas?. Repasa otra vez la novela o directamente léela otra vez.