Estos días del año suelen ser interesantes a nivel estadístico e informativos porque las compañías suelen sacar sus reportes financieros. En ellos puede verse algún atisbo de información sobre planes de futuro aunque sobretodo datos de ventas de hardware o de software. Sin embargo, a veces, pasan cosas como la de hoy.
Tatsumi Kimishima (68 años), actual presidente de Nintendo desde 2013, ha anunciado hoy que se retira de la dirección de la compañía y que dará paso a Shuntaro Furukawa (46 años) dando así la presidencia al segundo CEO más jóven que ha tenido la empresa desde que se dedica a los videojuegos (Iwata tomó las riendas con 4 años menos).
Hay que recordar que Kimishima fue un "sustituto" por la prematura muerte de Satoru Iwata y él mismo comentó en alguna ocasión que lo veía como algo temporal. Quizás fuese el encargado de terminar aquellos proyectos que Iwata tenía a medias y una vez hecho debería encargarse de buscar un sucesor, sin embargo sorprende bastante este cambio repentino dada la buena situación actual de la compañía. De momento no ha trascendido más pero en los próximos días es la reunión con accionistas donde habrán preguntas y respuestas al respecto.
El actual Kimishima, imponente perdonando la vida a los demás y el nuevo presidente con un micrófono para hacerle una pregunta a alguna idol con la que se la pela a solas en su salón tras salir del club de informática. No, en serio, me ha sorprendido físicamente.