Lo que tenemos clarísimo ahora mismo es que estamos en frente de una nueva fórmula. Una fórmula revolucionaria de cojones, si se me permite el hype.
Han eliminado el componente RPG y se han centrado en el singleplayer, lo que me la pone extremadamente dura, y eso que es de lo que más me gustaba de Souls y BB... Miyazaki sabe contar historias solo con objetos y diálogos cortos con los NPC, así que ahora que se puede explayar en un mundo centrado en alguien con nombre, cara y pasado reconocidos, no en un "campeón de las cenizas" o en un "cazador anónimo" el lore será más profundo y detallado.
Que putas ganas tengo de pillarlo por banda. Si es tan bueno como creo, es posible que pasemos del soulslike al sekirolike.