Ayer durante la Gamergy Orange Edition la Liga de Videojuegos Profesional anunció que la undécima edición de la División de Honor sería la última, la organización daba la bienvenida a la Superliga Orange para la próxima temporada.
En ese momento quedaban muchas incógnitas en el aire y muchos se preguntaban cuál sería el futuro de la máxima competición nacional, la LVP acaba de desvelar nuevos detalles sobre lo que llevan tiempo planificando.
La Superliga es fruto de la colaboración con el Grupo MEDIAPRO y Orange y contará con mejoras notables tanto en la competición como en el contenido y también en las retransmisiones. Este proyecto es solo un paso más en la profesionalización de los deportes electrónicos en España gracias al trabajo de la LVP.
La producción audiovisual tomará un estilo televisivo y para ello tendrá dos nuevos platós en el propio edificio IMAGINA en Barcelona, se trata de un centro de producción que pertenece a Mediapro. Desde allí no solo se emitirán los encuentros de la Superliga sino que también será el escenario de los post-partido con los análisis de los expertos de la LVP. Gracias a estos recursos habrá una mejora en casi todos los aspectos como la presentación, el planteamiento audiovisual, el sonido y se implementarán unas estadísticas dinámicas.
El próximo año la compañía creará mucho más contenido alrededor de sus competiciones, para ello ampliarán su equipo de técnicos y creadores audiovisuales de la liga, tendrán su propia unidad móvil que se desplazará a las sedes de los clubes para hacer entrevistas e ir informando sobre la Superliga.
Al más puro estilo LCS en sus inicios la LVP ha tomado la determinación de crear su propio circuito de eventos presenciales que cubrirá todo el territorio español, así todos tendrán la posibilidad de disfrutar de la Superliga en directo.
Quizás para lo último hemos dejado una de las novedades más importantes ya que la LVP reforzará el sistema de retribución en sus competiciones, no solo darán mayor apoyo económico a los clubes participantes de manera fija sino que también se premiará en función de los resultados obtenidos y la implantación social. Se espera que esta medida no solo ayude a profesionalizar aún más el panorama sino que también aporte más estabilidad a los clubes, este dinero repercutirá en jugadores, entrenadores y árbitros.