Buenas tardes.
Esto que escribo lo hago con todo el dolor de mi corazón, pero no me quedan ya más soluciones.
Voy a empezar desde el principio, para que podáis valorar la situación.
Hace 4 años estando con compañeros de piso decidí adoptar una preciosa gata. Un compañero de piso, con algo de envidia supongo, decidió adoptar otro (el gato del que vamos a hablar).
Isi, que así se llama, fue un trasto desde pequeño. Muy cariñoso y muy juguetón y mi compañero de piso se hartó de él hasta el punto de querer matarlo. Lo evité haciéndome cargo yo de él.
Meses más tarde me mudé a una casa con su jardín y demás, donde los dos correteaban y pasaban el día fuera para venir por la noche a dormir a casa.
Año y medio después por problemas con la casera tuve que volver a mudarme. Esta vez a un piso en el que llevo dos años.
El gato aún castrado sigue marcando territorio, destroza sofás y con lo grande que es (7kg) se lleva todo por delante. Ahora me tengo que mudar y solo puedo llevarme a la gata. No puedo jugármela a llevar a Isi a un piso totalmente nuevo así que he decidido dárselo a una amiga de la familia que vive en un pueblo con 3 perros y 3 gatos, además de ser una amante de los animales.
Va a dormir en una cuadra calentito, en una cama de paja y lo van a alimentar cada día. Por lo que me dijo ella sale con la bolsa por la noche y vienen todos a comer (que es lo que hacía el mío cuando vivía en la casa aquella).
Me da pena. Muchísima pena separarme de él después de estos años durmiendo juntos pero ya no hay vuelta atrás.
Estoy casi seguro de que va a saber adaptarse. Es un gato grande y siempre ha echado de menos la libertad que tuvo, pero aun así tengo miedo a que se pierda.
La idea es llevarlo mañana después de comer y pasar la tarde con él. El domingo iré por la mañana a ver si sigue por ahí y después tendré que ir a mi casa a 600km y la próxima vez que pueda ir a verlo será en unos meses.
¿Alguno ha pasado por algo igual? ¿Qué tal se va a adaptar tras dos años en un piso?
Es el gato más cariñoso del mundo. Me espera en la puerta al venir de trabajar y se me tira encima si paso unos días fuera.
Os regalo un par de fotos de mi gordo: