Bueno, algunos me recordaréis porque hace cosa de un año abrí un par de temas hablando de la situación que tenía con un amigo del que finalmente me enamoré. Cabe decir que soy un chico y que abro este tema para que me aconsejéis sobre qué hacer ahora, porque estoy confundidísimo y no sé qué pensar ni que hacer. Espero de vosotros la misma seriedad que por entonces y que entendáis que no soy ningún troll. Lo contaré en modo historia, desde el principio, por si alguien no se acuerda de aquello. Gracias por leerlo todo si es que lo hacéis, es largo...
La cuestión es que al principio, cuando él, yo y todos los demás empezamos a quedar, no éramos más que dos amigos corrientes, a pesar de que pasaban las semanas y yo me daba cuenta de que sentía demasiado cariño por él para lo poco que le conocía y me esforzaba muchísimo en ayudarle. La verdad es que él al principio pasaba completamente de mi, pero pasado el tiempo empezó a hacerme caso. Basta que diga que poco a poco nos fuimos haciendo más íntimos. A él le era imposible afrontar sus problemas y los de la gente que le rodeaba y yo le intentaba ayudar. Así que poco a poco nos fuimos encerrando el uno en el otro. Un día, yendo en el coche, yo iba conduciendo y él me cogió de la mano. Yo me quedé flipando, pero para que me iba a engañar, me gustó, así que no dije nada. Al principio hacía peripecias para darme la mano, y hasta 5 minutos antes de llegar al sitio no se atrevía a dármela. La cuestión es que yo siempre le he dado el mando a él, jamás le he incitado a hacer nada que no quisiera.
Pasaban las semanas y salíamos prácticamente cada fin de semana a un pub. Cada vez que llevábamos dos copas, me pedía que saliéramos fuera y cuando estábamos bien escondidos, me daba un montón de abrazos, a veces hasta nos íbamos y no volvíamos. Abrazos no normales, muy cariñosos. Muchísimo. Yo seguía flipando, pero me callaba porque me hacía sentir bien y ala vez creía que le hacía sentir bien a él. Un día de estos, de marcha, me dijo muy, muy nervioso: "es que verás... yo desde siempre tengo un problema. Me dan pánico las mujeres, me da miedo que una quiera salir conmigo...".
Pasaba un poco más el tiempo, y cada vez que subíamos el coche, íbamos cogidos de la mano con normalidad y hacíamos lo posible por ir solos en el coche. Seguían pasando las semanas y cada vez era más normal darnos abrazos de minutos de duración, darnos algún beso en el cuello y decirnos que nos queríamos. De hecho, desde hace ya por lo menos un año, cada vez que hablábamos por teléfono acabábamos con un "te quiero mucho" y él se había inventado "un código" por si había gente delante.
Llegó el momento en que 9 de cada 10 veces quedábamos solos, y la que hacía 10 nos íbamos antes para estar solos un rato. Hablábamos por teléfono entre semana mínimo hora y media al día. Los sábados, como yo tenía una casa deshabitada, me pedía que fuéramos allí a ver una peli y dormir juntos. Así han pasado meses. Había días en que me hacía poesías por teléfono y me decía cosas como que "ojalá fueras eterno para que todo el mundo pudiera disfrutar de alguien como tú". Eso sí, siempre hemos dicho que éramos amigos.
Dejando de lado que yo siempre me he considerado heterosexual porque siempre me han gustado las mujeres, acepté hace ya meses que lo que sentía por él no era amistad. Así debe ser verdad eso que dicen que a veces te enamoras de una persona por encima de un cuerpo o un físico.
Total, la cosa seguía avanzando. Hicimos de una calle poco transitada "nuestro sitio". Íbamos allí cada viernes y casi cada sábado que no podíamos ir a la casa que tenía vacía. Tumbábamos los asientos del coche y él se tumbaba encima mío y me abrazaba. Así se quedaba siempre dormido y se despertaba diciéndome "uy, siento haberme dormido, es que estoy tan calentito y tan a gusto aquí...". Si un día no podíamos quedar, le daba un ataque de nervios y decía que no iba a poder dormir. Ha mentido a sus padres día tras día para vernos, igual que yo he hecho con mis amigos y familia...
Llegó un momento en que los besos pasaron de ser besitos en el cuello a que me daba besos con lengua en la barbilla y en la nariz. Sí, como lo leéis...podéis reíros si queréis... me obligaba a afeitarme bien para poder morrearme la barbilla. Al tiempo de estar así, los besos se fueron trasladando y ya eran en la comisura de los labios. Una noche abrazado a mi, como siempre (me decía "soy una lapa, eh?"), me dijo "dame un beso". Yo se lo dí cerca de la boca. Me dijo "otro", y yo le dí otro un poco más cerca. Me dijo "otro" y yo le dí en el mismo sitio de antes. Entonces me besó él en la boca. Me besó en los labios. En ese momento me dijo, "mira un nuevo juego, cada vez que digamos <<otro>> tenemos que darnos un besito", sobra decir que después de cada vocal venía un <<otro>>. El día siguiente parecíamos dos adolescentes ante el primer beso. No sabíamos cómo reaccionar, hasta que pasadas un par de horas volvió a besarme, y pasados 3 o 4 días, nos saludábamos besándonos y así pasábamos el rato. Él me pedía que le besara la barriga y hasta el pecho. Yo no he parado de decirle en 2 años que no hiciera nada que no quisiera y que todo lo que hacía tenía que ser porque le apetecía y él me juraba que así era.
Así que nada, llegó el verano y me fui a vivir a la casa que tenía vacía, con la intención ambos de que viniera él también a pasar el verano y poder estar siempre juntos y dormir siempre juntos. Los primeros días venía a todas horas y juntábamos los sofás y veíamos la tele abrazados. Eso cuando me dejaba ver la tele porque no paraba de darme besos y decirme "que te importa más la peli que yo?....pues dame un besito...". Mientras yo cocinaba, él venía, me abrazaba por la espalda y me daba mil besos. Cuando había alguien en casa, iba a la cocina y me pedía que fuera a ayudarle, todo para darme un beso a escondidas y preguntarme si estaba bien. El sábado hicimos una fiesta en casa, después de la fiesta, cuando se fueron todos, nos fuimos a dormir juntos. Me da mucha vergüenza contar esto, pero creo que es necesario y sé que no pasa nada. La cuestión es que ambos íbamos muy ciegos y no paraba de subirse encima mío, de restregarse, de darme besos y hasta me lamía los pezones (...). La cuestión es que "de repente" se quedó dormido, y se puso en una posición un poco forzada, de manera que mi mano quedaba bien cerca de su entrepierna. Yo iba cieguísimo, y las cosas como son, empecé a meterle mano. Supongo que me entendéis si te digo que se notaba que le gustaba, aunque supuestamente estaba durmiendo. Al rato, se dio la vuelta y "se despertó" diciendo "eh? qué pasa? pasa algo?" y yo le dije, no...tranqui. Total, volvió a subirse, a restregarse, etc.... y se puso boca abajo. A los 10 minutos, volvió a ponerse en una de esas posturas y estuvimos en lo mismo. Y al rato pasó lo mismo, se volvió a dar la vuelta y ahí se acabó la noche.
Al día siguiente la situación era un poco embarazosa, pero hicimos como si nada. Durante los días siguientes todo siguió igual y no parábamos de darnos besos y demás. Llegó el martes y estábamos con los sofás juntos, como siempre, abrazados. De repente, se volvió a dormir en un segundo y se volvió a poner en posición de ataque. Yo lo interpreté como que quería más de lo del sábado. Así que me dispuse a ello y parecía que otra vez le gustaba si era a juzgar por el estado del tema. La cuestión es que pasados un par de minutos, empezó a ponerse muy nervioso y se despertó diciéndome "tio, me estabas tocando???" yo me quedé un poco de piedra y le dije que lo sentía, pero que tampoco pasaba nada. Él me dijo que no pasaba nada pero que no lo hiciera. El miércoles estábamos en la misma situación, tumbados en el sofá, pero él besándome bastante apasionadamente aunque nunca tocó mi lengua. Yo toqué su labio con mi lengua y se apartó y me dijo "me has dado con la lengua eh?" (en plan coña), así que yo me lancé y le dije que nos dejáramos de "medias tintas". Que si le gustaba hacer todo lo que hacíamos y me besaba como me besaba jamás podía darle asco que mi lengua le tocara. Estos últimos días ya le notaba un poco extraño, algo distante...
En ese momento se puso muy nervioso, y me dijo que lo sentía, que nunca había querido confundirme!!! que todo lo que hacía era porque yo era su mejor amigo. Le contesté que no se engañara, que ningún amigo en el mundo hacía una milésima parte de lo que hacíamos nosotros. Entonces se tuvo que ir porque justamente su padre le llamó muy nervioso ( a las 3 a.m) porque "no le gustaba la idea de que estuviéramos siempre allí metidos". Total, que lo dejamos a medio hablar. Al día siguiente volvió y me dijo que había tomado la decisión de que esto se tenía que acabar. Que era su culpa, que me había confundido. Que "a él le gustan las mujeres, Y MUCHO! y que se quiere casar y tener hijos" y que se tenía que acabar. Yo le dije que estas cosas no se rigen por decisiones, sino por lo que dice el corazón.
Ahora viene lo más grave. Me contestó que él, en realidad, llevaba 3 años haciendo lo que hacía por pena. Porque le daba pena (he tenido algunos problemas de salud). No quería que pensara en la operación ni nada y lo hacía para hacerme sentir bien. Todo lo mencionado antes y un total de 1300 € en regalos, todo por pena. Que cuando me besaba "se sentía incómodo", pero lo hacía por mi. Que "la verdad es que esta semana tenía pensado decirte que tenía que acabar todo esto", cabe que diga que el mismo lunes me hizo un regalo de 480 €. Que lo sentía mucho, que no quería hacerme daño y que había tomado una decisión y yo tenía que respetarla. Le dije que nadie hace esas cosas 3 años por pena y que si es así, llevaba 3 años jugando conmigo y mintiéndome. Me dijo que sí, que me había mentido pero para hacerme feliz.
Al día siguiente volvió y me dijo que lo sentía, que se había equivocado de palabra. Que no era pena, sino que hacerme sentir bien le hacía sentir bien a él. Entonces le contesté que eso se llama como mínimo amistad, y que sinceramente lo que nosotros teníamos no era amistad. Yo quedé ultra-dolido por todo lo que me había dicho, pero él quería que fuéramos "mejores amigos". Así que me sigue llamando 3 o 4 veces al día y viene cada noche y me daba abrazos y besos en la frente.
Obviamente me he saltado muchas cosas, pero espero que quede claro lo difícil que está siendo esto para mi. Igualmente, yo puedo haber mentido y engañado al resto del mundo, pero siempre me he dicho la verdad a mi mismo. Igual soy gay, bisexual o no soy nada de eso, pero la verdad es que estoy enamorado de él, y lo peor de todo es que aunque le he perdido, creo que él (a pesar de que no lo acepte), también lo está de mi. Creo también que sus padres tienen MUCHO que ver en esto (por lo de que una vez le escucho decirme por teléfono "te quiero", y le dijo que "qué cojones es ese mariconeo? no me decepciones"), la llamada a las 3 a.m, y lo de que hace unos días volvieron a escucharle decirme "te quiero mucho", todo eso me hace pensar que son gran parte del problema.
Un saludo a todos y gracias por llegar hasta aquí...