Con cucharón en mano, al más puro estilo del Cid Campeador, el dueño de un establecimiento de hosteleria en el pueblo de Blanes- Cataluña, se tiene que defender de las amenazas vertidas contra su negocio y contra su familia.
Todo comienza desde hace varias semanas atrás, cuando comienzan a colgar en su restaurante los cansinos lazos amarillos.
El dueño del restaurante no quiere por los motivos que sea, y por cojones se los tienen que colgar.
Hasta el día de hoy cuando le han vuelto a colgar los lacitos y los ha retirado, momento el cual le han reprochado su actitud una indepe y la escalada de insultos y violencia verbal ha ido en aumento.
La cosa se ha puesto tan tensa que han amenazado a la indepe con un cucharón de cocina, me imagino que para partirla la cabeza.
Por supuesto, el restaurante está amenazado con destrozarse, y también la familia completa del dueño del restaurante al que los han dicho “iros de Blanes”, como si Blanes fuese de su propiedad.
http://www.elmundo.es/cataluna/2018/08/31/5b893489ca474104348b45cf.html
¿Cuanto tiempo falta para que corra la sangre? ¿Cuando comenzarán los asesinatos? Auguro que dentro de muy poco.