Justin Carter, un jugador del famoso MOBA League of Legends, ha ido a la cárcel debido a discusiones, acoso verbal y amenazas terroristas. Al parecer, este adolescente de Texas fue arrestado tras una disputa en el juego que derivó a Facebook y después condenado a diez años de cárcel, según las noticias del periódico estadounidense Dallas Observer.
No era la primera vez que el joven hacía comentarios ofensivos en la red tras jugar al videojuego. Los continuos “reports” y el problema de algunos jugadores tóxicos en League of Legends no constituyen ninguna novedad, pero al parecer Justin Carter se pasaba continuamente haciendo amenazas terroristas y bromeando sobre su estado mental. Cuando otro jugador le dijo que estaba loco, el joven contestó diciendo: “Estoy jodido de la cabeza ok, creo que me voy a ir a una guardería a disparar a niños y ver como corre su sangre por el suelo.” Tras este tipo de comentarios, solía añadir la coletilla “lol” y “jk” como si estuviese bromeando, pero la gravedad de sus palabras provocaba la alarma de muchos jugadores.
Una mujer canadiense llegó a llamar a las autoridades. La policía, tras investigar, vio que Justin Carter era un usuario reportado varias veces por amenazas graves en Facebook, por lo que el jugador fue arrestado y pasó cuatro meses en Come County Jail (una cárcel americana), donde su abogado dijo que recibió algunos ataques brutales, añadiendo que el asunto se está yendo de las manos, y que un chico inocente de 18 años no puede ser enviado así como así a la cárcel con gente peligrosa.
Según su abogado, Don Flanary: “ El modo en el que el sistema de justicia debería funcionar es: primero pruebas el crimen, y después castigas. Pero en este caso, simplemente han arrestado a Justin y le han castigado cuando no se había probado nada.” El abogado comparaba las disputas en Facebook con las del patio del colegio, en las que alguien se calienta por un enfado, y suelta varias cosas sin pensar. Flanary alegaba que “debe de haber un claro peligro presente, y una amenaza verdadera, y sino la Primera Enmienda protege tu discurso.”
Al parecer, alguien anónimo ha pagado la fianza de $500.000 dólares del joven y Flanary agradece a la comunidad gamer por el apoyo dado. Flanary añade: “Estamos muy agradecidos a los miles de americanos que han apoyado a Justin. Han sido un gran apoyo y por una buena razón. Vivimos en un mundo en el que el gobierno puede mirar a través de nuestros mensajes en Facebook y leer e interpretar cada una de nuestras palabras. Los ciudadanos estadounidenses tenemos la elección de elegir a gobernadores que monitorizan nuestros mensajes y criminalizan nuestras palabras, o de escoger que nos dejen vivir en una sociedad libre.”
Al parecer el caso no está completamente cerrado, pero el abogado está buscando que se desestime, aunque tendremos que esperar una semanas para descubrir el final de la historia.