Entrevista de El mundo a Carolina Punset, (ex de cs). Pondre en negrita las preguntas y la respuesa letra normal.
http://www.elmundo.es/comunidad-valenciana/2016/12/06/5845a65c468aeb970a8b4611.html
¿Piensa presentarse frente a Albert Rivera para liderar Ciudadanos?
Creo que el problema que tiene Ciudadanos no se resuelve cambiando a Albert Rivera por Carolina Punset o por fulanito, se resuelve modificando el rumbo 180 grados. Desde el punto de vista personal presentarme contra Rivera es lo último que estoy pensando ahora. Presentarme no es la solución a los problemas de Ciudadanos. Ahora bien, hay tiempo todavía para pensarlo y si eso pudiera contribuir a un cambio de modelo se podría reflexionar. Es una idea pero hay una batería de ideas que podríamos poner en marcha para que C's no pierda relevancia política, como ha ocurrido en el último año.
¿Qué ha cambiado en Ciudadanos que ha provocado su desencanto con el partido?
El problema es que hemos cambiado las ideas y los valores por una sucesión de eslóganes, frases huecas y marketing político. Condicionamos nuestras ideas a lo políticamente correcto. El discurso del partido está pensado por empresas y directores de comunicación para no perder votos. Son los departamentos de comunicación los que nos van diciendo qué podemos decir y qué no, y eso nos resta personalidad y nos condena a la irrelevancia. Hemos apartado a la clase ilustrada que fundó este partido.
Usted señalaba en su escrito de dimisión que Ciudadanos debía recuperar sus valores laicos y progresistas. ¿Los ha perdido?
Ese es otro de los grandes males que acechan al partido. Yo detecto grandes titánics o brechas en el partido. El primero, del que ya hemos hablado, es el dominio de la comunicación sobre la política. El segundo es que, en aras de la transversalidad, en la expansión de la marca, se han incorporado los despojos que representan a las corrientes más rancias de otros partidos que, además, han sido situados a dedo. Esta situación yo la he vivido y sufrido cuando era portavoz en las Cortes Valencianas porque, encima, el partido favorece que este tipo de personajes se instale en la formación.
Es muy crítica con la manera en que la cúpula dirige Ciudadanos.
La secretaría de Organización se ha convertido en una fuente inagotable de conflictos. Pretende controlar todas las declaraciones y movimientos. A mí, como portavoz parlamentaria, me prohibieron reunirme con concejales de mi partido. Cuando alguien va a hablar contigo a los cinco minutos les llaman para preguntarles qué querían o, directamente, para echarle la bronca. Además, a la hora de elegir determinados cargos se hacen votaciones electrónicas sin ningún tipo de garantías.
¿Ha aflojado Ciudadanos su discurso contra los nacionalismos?
Existen estudios de empresas que aconsejan a C's no herir la sensibilidad de los nacionalismos moderados. Cuando hice campaña en el País Vasco recuerdo que nos aleccionaron con argumentarios para no dañar ciertos sentimientos. A los dos meses dimití. A mí ese tipo de advertencias no me las hacen dos veces. Ciudadanos no puede suavizar su discurso contra el nacionalismo ni contra el regionalismo. Nuestro ideario no puede girar en torno al patriotismo identitario español pero tampoco el vasco, catalán o valenciano. Debemos defender la idea de ciudadanía. Ese era nuestro discurso único y original y a ese discurso estamos renunciando de manera obvia cuando tenemos representantes institucionales en la Comunidad Valenciana que se ponen al frente de carteles que dicen 'Alcémonos valencianos' o cuando tenemos representantes que dicen que están orgullosos de ser catalanes.
¿Se ha equivocado el partido con su apoyo a Mariano Rajoy?
El error ha sido la estrategia política errática. Parecemos un partido poco coherente, incluso veleta, que se mueve al sol que más caliente. Pasamos del veto a Rajoy a tirarnos a la piscina con él. Ahora ya ni criticamos al PP. Además, no nos pringamos para gobernar y eso tampoco lo entiende muy bien la gente. Otro ejemplo de ese travestismo político se percibe en que denunciamos de forma permanente las estructuras administrativas que son innecesarias y duplicadas, y un gasto inútil para la ciudadanía. Pero, sin embargo, estamos en las diputaciones provinciales con diputados. No es coherente criticar instituciones en las que luego estamos. Lo más sensato es no participar, como hacía UPyD. Debemos ser críticos y constructivos, pero hemos dejado de ser oposición.
¿Peca Ciudadanos de personalismos, como Rosa Díez en UPyD?
Tanto Rosa Díez como Albert Rivera son personas que se han ganado su liderazgo a pulso, personas tremendamente inteligentes, dotadas, con capacidad de liderazgo, con talento. En el caso de C's no discuto que Rivera deba tener una preponderancia sobre el resto del equipo. Nadie lo discute. Pero es una pena que no se deje sobresalir a personas que le pueden acompañar. Hay personas que engrandecerían la figura de Albert porque darían la imagen de existe un equipo. El propio PSOE, con toda la vieja política que dicen que es, tiene un comité directivo en el que se discute a tortas puntos de vista diferentes.
¿Se puede aplicar órganos más democrático en Ciudadanos?
Ese comité del PSOE en Ciudadanos no existe y, lo peor, no existirá nunca. Por ello, el presidente del partido sólo se rodea de los que básicamente le aplauden. Yo veo un problema porque considero que mi partido no consigue, de este modo, incorporar otros puntos de vista para que haya un cambio.
Ante este panorama en Ciudadanos que para usted es tan desalentador ¿qué propone?
Una alternativa para empezar a cambiar las cosas sería que hubiera juego limpio en el congreso y que nos dieran oportunidad a los afiliados de base elegir a los representantes orgánicos a nivel territorial. Una forma de cambiar la relación con las bases. Creo que lo que es bueno para elegir a nuestro presidente, es bueno para elegir al resto de cargos orgánicos. Pero para que la cúpula reaccione debe haber presión por parte de los afiliados, simpatizantes y votantes. Si esa corriente surge, yo estaría acompañando, no quiere decir liderando, a los que estuvieran dispuestos a presentarse en el congreso, como alternativa.
Y entre ese cambio, ¿habría que reemplazar a Albert Rivera?
Creo que la casa no se puede empezar por el tejado, que no sirve para nada cambiar un presidente por otro. Entre otras cosas porque creo que Albert es un buen presidente para C's. Lo que está equivocada es la dirección política del partido.
Entonces ¿lo malo es el organigrama directivo?
Si cambian los sistemas de elección se abriría una ventana de aire fresco para que entrara savia nueva, personas muy interesantes. Evitaríamos recoger lo que otros partidos no quieren, lo rancio y corrupto de otros partidos, con lo que no tenemos nada que ver.
¿Usted promueve una revolución de ideas en su partido?
Hay tiempo para presentar candidaturas a la presidencia del partido. Hay que esperar hasta dónde son capaces de llegar en su ceguera. Ha pasado con otros partidos que al final prefieren morir con las botas puestas: el PSOE en País Vasco, el PSC en Cataluña, UPyD y ahora parece que ocurre los mismo en Ciudadanos. Pero mantengo la esperanza de que haya alguien que reaccione para salvar un proyecto político muy importante para España. Si hay ideas nuevas la democracia interna es imparable
Con sus palabras da la sensación que hay una estasi o gestapo dentro del partido...
Hay un control tan férreo que cuando alguien viene a visitarme a mi despacho, sé que automáticamente alguien de organización va a hablar con él. Para saber de qué he hablado, para advertirle o para echarle la bronca. Hay cantidades de expulsados por conversaciones de whatsapp.
¿Está encontrado muchos apoyos en su cruzada del cambio interno de C's?
Son ideas que han fraguado en privado, porque en público nadie se había atrevido a decirlo, porque esto marca un antes y un después en tu vida política. Por eso a mucha gente le costará mucho decirlo públicamente porque su puesto depende de ello. En mi caso, no tengo miedo porque yo no dependo ni personal ni profesional ni económica ni políticamente de ser palmero de nadie. Ni por estar callada. Hay que gente que tiene miedo a que le sancionen, a que le expulsen o que le sometan a escarnio público. Como me han sometido en determinadas reuniones de partido. Estoy curada de lo que puedan decir de mí cuatro reaccionarios, pero hay gente que le da apuro.
Hace poco tuvo una reunión con gente fundacional, como Fernando Sabater...
Sí, con la gente a la que ya no escuchamos. Fue muy satisfactorio porque dentro de lo que es este desanimo que es pelear contra los aparatos de los partidos, que son apisonadoras muy potentes de tu prestigio personal, ha sido muy gratificante hablar con personas de la talla intelectual de Cayetana Álvarez de Toledo, o fundadores del partido como Albert Boadella, como Arcadi Espada, y otras personas con distintas sensibilidades que conveniaron conmigo que lo último que puede hacer uno es renunciar a su perfil, a sus ideas , a sus principios y a sus valores. Y que para ganar votos no todo vale.
Si no fructifica su idea ¿qué futuro augura para Ciudadanos?
La pena es que se está poniendo en peligro un partido político muy importante para España, que es dique de contención contra el nacionalismo y que combate el sectarismo. Con su forma de hacer las cosas tampoco están recibiendo más votos. Es una estrategia errática y equivocadísima y van a seguir perdiendo votos si siguen en esa línea.
¿Tiene esperanza?
Esperanza no mucha. Pero soy de las que pelean hasta el final... y no voy a dejar de hacerlo.
La verdad es que hay cosas dentro de C's que huelen muy mal, por ejemplo la prohibicion de pactar con cualquier partido regionalista o el paso a lo politicamente correcto, vease abandonar la postura que tenia sobre la viogen, la cual era sin duda la mas neutral entre los 4 partidos grandes.
Pero sin duda lo peor viene por el abandono de su programa economico, que parece que este mas alejado de lo que es el perfil de Garicano para ir hacia un programa que comparte las politicas de forma muy parecidea al PP y PSOE. Si añadimos la postura si-no con Rajoy...
Ciudadanos a este paso sera la nueva izquierda unida.
